Diego Vasallo, un gran ejemplo del rock hecho artesanía
Por: Boris Grushenko
Citarse con la actual gira de conciertos de Diego Vasallo, de viaje con un nuevo disco llamado "Malo ni bueno", ha sido intenso a su paso por Basauri, emocional y emocionante. Es placentero tener la oportunidad de charlar con un referente artístico y musical, y si tuviera que calificarlo con una palabra, diría: "Serenidad". Es un gran ejemplo del rock hecho artesanía.
26 Enero de 2024 en Teatro de Basauri Social Antzokia, Basauri
- Grupo: Diego Vasallo.
- Lugar: Teatro de Basauri Social Antzokia.
- Precio: 18 en la venta anticipada.
- Público: Unas 120 personas.
- Promotora: Ayuntamiento de Basauri.
Diego Vasallo afronta una gira de conciertos donde muestra su nuevo disco, el EP "Malo ni bueno". Diego es un músico, compositor y poeta, que varios medios aún identifican como "el de Duncan Dhu" pero su figura actual va más allá de aquella era en la liga mainstrean de los años 80, 90 y los primeros años de este siglo XXI. En su actuación de Basauri, aparte de ese álbum de cinco canciones, Diego ha hecho un exquisito recorrido por el resto su discografía.
La banda de Diego Vasallo encargada de defender su proyecto en directo en 2024 está compuesta por músicos de la categoría de Fer García (guitarra y voz), Bobby Relac (bajo y guitarra) y Andoni Etxebeste (batería, percusiones, voz), almas de este concierto de Basauri programado a las 20 h. que empezó puntual. Antes, fui testigo del ensayo previo, un ensayo exigente, minucioso, detallista, extenso, y que les dejó un margen de tiempo ajustado: ir al camerino, vestirse para la ocasión y... ¡al turrón".
El directo del Diego Vasallo de hoy día es de una puesta en escena verdadera, bella, que hace justicia al halo conceptual, musical y literario de este artista donostiarra de 57 años. A través de un repertorio de 17 temas intemporales, Diego nos acarició con texturas y sonidos folk, blues y rock and roll. A ello sumó esa personal poética introspectiva tan habitual en su obra (el paso del tiempo, la culpa, el recuerdo, el olvido, el amor y el desamor, el absurdo y las contradicciones de la vida).
El concierto empezó con "Mi historia" (2020) y "Mapas en el hielo" (2016), navegando entre oleaje folk y blues, para continuar luego con ensoñaciones alrededor de R'n'B con "Cargamento" (2020), recorriendo a continuación su extensa discografía ("Esta noche no se parece a ninguna" (2020), "Línea directa con tu corazón" (2022), "Ver para no creer" (2010), "La vida te lleva por caminos raros" (2005), tocando también pasajes del nuevo trabajo, como "De este lado", "Quiero lo que no se puede", "Malo ni bueno" y "Nuestro infinito".
Diego Vasallo, vestido sobrio, cantando con una guitarra Gretsch, sin prisa, cerró el solicitadísimo bis con "La vida mata", composición del álbum titulado "Los abismos cotidianos" (2005). Selló de ese modo una hora y media de privilegio, el tiempo que permanecieron en escena él y el resto de la banda, con una cadencia vital cercana, en un teatro rendido a la evidencia, un teatro con su aforo a medio gas, donde la historia se repite, cuando ciertos medios inducen con sus radiofórmulas al consumo rápido y a devorar sin masticar, otros disfrutamos ajenos a eso, entregados a un concierto como este donde la música acaba convertida en algo bello. Todo esto me lleva a recordar una conversación durante el ensayo con uno de los jóvenes técnicos, que me transmitía su marco musical preferido, fácil de deducir porque es el inducido machaconamente por la industria musical (urbano & reguetón), que relaciono con aquella canción de Modestia Aparte que decía: "¿Y qué más da?, si son cosas de la edad". Sin ánimo de hacer un ejercicio boomer y menos de cuñado, quise transmitirle que algún@s, con la edad y el paso del tiempo... nos decantamos por la artesanía y nos alejamos de la industria. Diego Vasallo es un artesano del rock, de letras plano-secuencia, ásperas, arenosas, nebulosas, ambiguas, nos lleva por espacios, otrora habituales, hoy identificados como fronterizos, al intentar salir de los cauces más estrechos de las aguas del rock. Si tienes oportunidad, no dudes en asistir a un concierto suyo.
Hasta hoy se llega desde el ayer. Y ya a mediados de los 90, Diego buscó con su proyecto Cabaret Pop (1991), un modo personal e íntimo, de expresarse. Más tarde, Diego Vasallo y Cabaret Pop (1995) dio justa velocidad de crucero a ese proyecto, quizá, ¡quién sabe!, lo creó como válvula de escape del trepidante ritmo, en términos de producción artística y promocional, de la voraz industria musical de entonces. En 1997, instauró la marca artística actual: Diego Vasallo (cuatro años antes de la inicial disolución de Duncan Dhu, banda de la que, a diferencia del actual Mikel Erentxun, no toca nada), y allanó así el camino que luego le ha permitido alejarse del ruido, de los procesos digestivos rápidos, de las autopistas, del "para ayer", y... de lo mundano, para, en definitiva, perfilar su mirada hacia lo próximo, lo pequeño, lo humano.
"Malo ni bueno", su nuevo disco en formato EP, lanzado en octubre de 2023, grabado en Green Farm Recording y Garate Estudios por Fer Gargía y el mismo Diego junto a Kaki Arkarazo, es un gran ejemplo del rock hecho artesanía.