Hace poco, los miembros de Moonflower nos llevamos la sorpresa de que, desde Rusia, un aficionado recomendaba nuestro disco. En América hace tiempo hicimos una pequeña parroquia de seguidores, gracias a los dos años que vivimos allí y a la gira que realizamos por la costa este. Pero no siempre vienen de tan lejos las noticias y las experiencias... Hace unas semanas recibíamos la invitación para tocar en la terraza de uno de los centros de El Corte Inglés en Valencia y a pesar de las nulas condiciones económicas que nos ofrecieron, decidimos aceptar porque nos apetecía tocar en un lugar así. A la iniciativa le llaman Música en las Alturas, y lo cierto es que rinde honor a su nombre. Se toca desde una octava planta con impresionantes vistas a la Ciudad de las Artes y las Ciencias pero también al sensacional Jardín del Turia, una de las obras que costó una millonésima parte menos que los edificios de Calatrava pero que luce de forma fantástica en esta ciudad. En los últimos dos tres años se han popularizado mucho los conciertos en terrazas o azoteas e incluso en jardines al aire libre. Para nosotros, cualquier lugar donde la música en directo se haga un hueco es positivo ya que en los últimos años hemos visto cómo el circuito de salas sufre las consecuencias de la crisis y, sobre todo, de un modelo que apuesta por grandes festivales en detrimento de los pequeños espacios. El músico disfruta mucho más con la cercanía del público y hay que recordar que los macrofestivales son un coto muy cerrado, accesible solo a los grupos con poderosas agencias de contratación. Cada vez hay distancia entre la clase alta de la música y la clase baja, esa que a duras penas se pagan los gastos. Pocos grupos pertenecen a una hipotética clase media... Y nos hemos vuelto a ir del hilo... Decíamos, que tocar en terrazas es un pequeño lujo, siempre y cuando las condiciones técnicas y meteorológicas acompañen. En Valencia vivimos en un eterno verano que nos permite disfrutar de muchos conciertos de este tipo. Lo mejor es cuando la música acompaña al atardecer. Se convierte en un preciosa ceremonia de la que disfrutan músicos y público por igual. Moonflower hemos realizado ya varios conciertos de este tipo y, será casualidad o no, novedad o no, pero siempre ha habido bastante público disfrutando de la tarde noche. Público que, otra ventaja, es de todas las edades. Pueden venir padres con niños, tu público de siempre, y personas más mayores que difícilmente acudirían a una sala a altas horas de la noche. Hemos disfrutado mucho de la experiencia de Música en las Alturas organizada por El Corte Inglés, como también lo hemos hecho en otros conciertos privados que hemos tenido el placer de hacer en una terraza de un edificio histórico de Valencia. Tener la ciudad a tus pies es una sensación muy bonita. Esta vez estuvimos tocando cerca de una hora tanto canciones de nuestro primer disco, First Time, como del segundo, Round Trip, un álbum publicado hace unos meses con Sello Salvaje. Cada vez sentimos más nuestras las canciones. Después de un periodo de rodaje, somos capaces de tocarlas en muchos formatos. El de la terraza ha sido un concierto eléctrico controlado o suave, ya que pensamos que esa era la fórmula que mejor se adaptaba a la circunstancias y al público. PD: El viernes 24 de julio Moonflower participaremos en la cuarta semifinal de Sona la Dipu en Almussafes, en la que tocaremos con Wiol y Funkiwi. ------------------------------- por Moonflower / grupo pop de Valencia formado por María López, Josep Bartual, Thomas Mantovani y Fran Mesado