Ha tenido que ser Google quien me recordara que, de no haber sido fulminado por aquella bala, John Lennon cumpliría hoy 70 años. Todo un abuelito. Me pregunto cómo hubiera envejecido, ¿seguiría con Yoko Ono?, ¿seguiría dedicándose a la música?, ¿sería la misma leyenda? ¿tendría mi mismo respeto? Tal vez, si Mark David Chapman no hubiera disparado, John habría encontrado otras balas en su vida, tal vez disparadas de lejos, ó a unos pocos metros, ó tal vez desde su propio revolver interno que parecía llevar siempre cargado.

Cuando era una adolescente, John Lennon ocupaba la mayor parte del espacio de mi carpeta, de aquellos ?clasificadores? que llevamos a clase y forrábamos de fotos y que eran una especie de seña de identidad. Junto con otros ídolos juveniles de los que fui víctima, chicos guapos de la época, ó incluso el Ché; John Lennon estaba para mí por encima de todos. No entiendo muy bien qué representaba. Me apasionaban los Beatles, los descubrí de muy pequeña gracias a Jesús Hermida, que hizo una seccion en su programa en el que un grupo llamado Liverpool interpeba versiones de los Beatles y se trataba de adivinar el titulo de las canciones. Lennon se convirtió en algo más que mi beatle favorito; admiraba su talento, me parecía brillante, creativo, valiente, guapisimo..., me enamoraba su voz, conocía todo sobre él. No estoy segura de si quería casarme con él ó ser su versión femenina. Supongo que era una especie de símbolo en una época en la que me encontraba atrapada entre la rebeldía y la sumisión.

Lo cierto es que me encuentro un poco alejada de aquel Lennon, hoy es como un desconocido para mi, quizá me encuentro con criterios más objetivos: la calidad de su música, las turbulencias de su mundo interno que le llevaron a sublimarse en autenticas joyas musicales pero tambien a cometer más de una estupidez... criterios libres de las ensoñaciones románticas, metafísicas y de autoconstrucción de una adolescente. Sin embargo... hoy, al encontrarme el garabato de su cara (portada de Imagine) en Google, en Youtube... es como si le echara de menos..., y siento una gran pena de que Imagine que casi era un himno para mí, haya pasado a convertirse en una canción escuchada hasta la saciedad que apenas me produce ya placer alguno. Esa sensación de fraude con la que uno se encuentra al crecer, por otro lado tan necesaria para no ser un eterno Peter Pan, hace que el mito no pueda mantenerse. Sin embargo, aquí estoy echándole de menos... no se muy bien por qué, sigue siendo alguien especial.

Suerte que de vez en cuando, entre rutina y rutina, entre quehacer y quehacer laboral, familiar, etc... uno puede abrirse una cervecita, ponerse música y regresar al Peter Pan que aún llevamos dentro y que nos permite soñar, libres de criterios objetivos.

Feliz cumpleaños John.

https://www.youtube.com/watch?v=IxLnIRVVwIM

Veronica