Por Sergio Santos
Gracias por recibirnos, Fortu. Del nuevo disco en solitario, nos ha sorprendido muy gratamente lo variado que es. No hay canción parecida a otra y algunas de ellas te pillan en un territorio sonoro que no te esperas en un álbum de Fortu de Obús.
Bueno, me alegro, ¡me alegro mucho! Esa era justo la idea. No me quería repetir a la hora de la composición y lógicamente en mi carrera en solitario tengo más posibilidades de componer fuera del estilo o la línea general que llevamos en Obús. Tengo libertad de hacer un abanico amplio, con muchos colores, y he hecho un álbum variopinto que creo que resulta ameno para el que lo escucha. Me alegra que abras la entrevista diciendo esto, jajaja.
Si por nosotros fuera tocaríamos 4 horas... [risas] pero van a ser conciertos de dos horas y media
La primera canción del disco, que le da título, es todo un alegato por la defensa del planeta y en contra de las políticas ultraliberales que buscan los beneficios económicos a cualquier costa. ¿Cómo crees que se conjuga nuestra postura ecologista con las grandes giras de rock? Por ejemplo, de car a 2022, Coldplay anunció una gira "medioambientalmente sostenible" en la que se han comprometido a plantar un árbol por cada entrada vendida.
Pues no está nada mal, la verdad. Es una buena propuesta, se trata de cada uno poner nuestro granito de arena. Efectivamente, el disco se abre con "Rompes mi corazón", un relato entristecido de lo que le hemos hecho y le hacemos al planeta, exprimiéndolo y empujándolo hasta el punto de que no puede más y nos lo está haciendo saber. Tsunamis, tormentas más fuertes que nunca, el calentamiento global y también las mayores olas de frío, todo eso no son más que la expresión del hartazgo del planeta. Lógicamente todos tenemos parte de culpa, y hasta cierto punto hay cosas que no se pueden evitar, nos tenemos que desplazar, hay que fabricar, etc... Pero se trata de hacer lo posible para, entre todos, tratar de revertir esta situación antes de que sea totalmente imposible.
Sí, al final la clave es esa, poner cada uno nuestro granito de arena. Los que tenéis la posibilidad de generar opinión y llegar a mucha gente también podéis jugar un papel.
Eso es. Escribir una canción sobre ello es solo un gesto, igual que tú en tu casa reciclar los envases para que el mar no se llene de plástico. Pequeños gestos a nivel individual que pueden suponer un gran cambio global.
Hoy si se celebra algo prefiero una copa de champán antes que un whisky. Me sienta de puta madre y no me machaca el hígado ni la garganta
La tercera del álbum "Como el viento limpia una ciudad" empieza con una impresionante introducción a piano y luego se suman cuerdas y más instrumentos en un crescendo brutal y tú no cantas hasta el minuto y medio. Es la canción más diferente del álbum y seguramente la más difícil de llevar al directo, como te la planteas? Al menos hasta el minuto tres que se convierte en una canción de rock duro tremenda y en una onda completamente distinta a los 3 minutos anteriores.
Sí, esa canción es especial y efectivamente es la más distinta del disco. Comienza con un piano clásico y va creciendo hasta la explosión hard rock de la segunda mitad. La verdad es que mientras lo grabábamos y luego en la producción del álbum, que la ha hecho Javier Vargas, yo no estaba pensando demasiado en cómo la llevaría al directo. La idea era simplemente hacer una canción diferente y lo mejor posible, y luego ya se verá. Si te digo la verdad ahora mismo estoy 100% enfocado los concierto del 40 Aniversario de Obús de cara a este 2022.
Estar cuidándome la voz desde hace años me permite poder dar esos saltos y llegar a registros en solitario que con Obús no escucharías
Claro, sobre eso también te iba a preguntar. Supongo que el esfuerzo de seleccionar el repertorio para un evento tan significativo como el 40 aniversario ha tenido que ser titánico, ¿verdad? Porque te pones a contar y qué tenéis, nueve o diez álbumes? ¿100 ó 120 canciones originales?
Si te digo la verdad, ¡no llevo ni la cuenta! [risas] Sí que es cierto que es jodido seleccionar los temas para hacer un repertorio equilibrado, que tenga un poco de todo. Porque claro, hay temas que sabes que no pueden faltar, no puedes hacer un concierto aniversario y no tocar el "Vamos muy bien", "Dinero dinero" o el "Va a estallar el obús". Son temas que han marcado y que al final todo el mundo espera oír. Pero luego te pones a coger de este disco y de este otro y te juntas con muchas, y hacer un reper de 25 ó 30 canciones no es fácil. Si por nosotros fuera tocaríamos 4 horas y a tomar por culo [risas] Pero no, van a ser conciertos de dos horas y media más o menos. El problema es que luego te pones a ver las redes, los comentarios de los seguidores, y hoy mismo he visto un comentario de un fan que sugería tocar un tema que ni habíamos pensado, y he dicho, joder, es que esta también molaría... En esas estamos.
Hablando de conciertos largos: ¿cómo cuidas tu voz? ¿Algún truco para llevar 40 años cantando heavy metal y no haberte quedado sin garganta?
Pues cuidarse, ni más ni menos. Mira, yo he bebido whisky y fumado como el que más. Y no te digo una copa suelta, no, te hablo de botellas enteras yo solo.
Nací con Obús e intentaré morir con Obús, eso está claro. Pero mira, una vez que te bajas del escenario es importante ser buena persona, no eres más que Pepito o Juanita, eres igual
Sí, viene en el "pack de rockero", jajaja.
Eso es, casi es parte del oficio, ¿verdad? El tema es que eso te acaba destrozando, macho. Hace tiempo que no bebo. Y no fumo. Mira, a día de hoy si se celebra algo prefiero tomarme una copa de champán antes que un whisky. Me sienta de puta madre y no me machaca el hígado ni la garganta. Y lo agradezco al cantar, claro. Mira, el otro día estaba con mi otorrinolaringóloga y me dijo, 'Fortu, es que tienes las cuerdas vocales de una chavala'. Me quedé flipado, pero al final es una alegría. Se nota que cuidarse da sus frutos.
Y precisamente sobre la voz y engarzando con lo que comentas. Otra cosa que me ha llamado la atención al escuchar tu disco es que tu rango vocal es muy amplio y con algunos registros que no se oyen en tus discos con Obús.
Claro, es lo que te decía antes. Al final con Obús tengo un papel, un rol como artista y también unas normas estilísticas, por así decir. Y en solitario tengo la libertad para, si me apetece, cantar una canción muy lenta en un registro bajo y armonizando una quinta o una octava por encima en una voz más aguda. Estar cuidándome la voz desde hace años me permite poder dar esos saltos y llegar a registros que con Obús no escucharías.
¿Qué recuerdas de aquel mítico concurso Villa de Madrid de vuestros inicios?
Aquello fue genial, tío. Yo simplemente tocaba con mis amigos y bueno, nos presentamos, ganamos el concurso, nos permitió grabar un disco y poco después dimos un primer concierto en el Pabellón del Real Madrid, ahí en Plaza de Castilla. Antes no se vendían entradas por internet ni en comercios, solo en las taquillas del recinto. Fue acojonante ir allí y ver colas de cientos, de miles de personas, todos recién salidos de la dictadura, todos descubriendo lo que era ser libre, ser heavy. Recuerdo ver los grises a caballo alrededor del pabellón y pensar que ojalá no pasase nada chungo... Al final fue todo bien y llenamos el pabellón con casi 6.000 personas, fue un hito.
Meter en nuestro inicio a casi 6.000 personas en el Pabellón del Real Madrid, ahí en Plaza de Castilla, fue un hito.
Terminamos ya con una pregunta un poco enrevesada pero que me parece interesante. Después de 40 años en la música con y sin Obús, ¿qué tiene tu carrera en solitario de Obús, y qué tiene Obús de tu carácter en solitario?
Bueno, al final yo creo que se trata de ser auténtico hagas lo que hagas, y de no ser un gilipollas [risas]... Yo me identifico totalmente con Obús como persona. Yo soy muy rockero, me gusta su dureza. Pero también tengo un lado menos conocido, con estos discos en solitario me he abierto y he mostrado esa ternura musical, esas melodías que con Obús no hago. Las dos partes tienen algo de mi. Nací con Obús e intentaré morir con Obús, eso está claro. Pero mira, una vez que te bajas del escenario es importante ser buena persona, no eres más que Pepito o Juanita, eres igual. Yo creo que soy un tío sencillo, familiar, cariñoso y trato de serlo en todas las facetas. Encima del escenario la gente espera de ti ver una estrella, verte mandar, verte darlo todo, con el ego y la energía a full. Pero al bajarte hay que ser persona. Y eso es lo más importante. Esa es la clave.
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