ENTREVISTA: Ilegales

Ilegales:

En el disco toca la viola Cristina Gestido porque es la mejor, no por ser mujer


Por Sergio Santos Sánchez

Ilegales, entrevista, Enero 2019 - La Ganzua

20 Enero, 2019 | Sergio Santos Sánchez
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Ilegales regalan un chute de energia al rock and roll cada vez que sacan un disco. Liderados por el inimitable e irredento Jorge Martínez, esta entrevista vale su peso en oro. Va sobrada de material caliente gracias a la complicidad entre el músico astur y nuestro colaborador Sergio Santos. Esta charla resume una hora de pasión por la música.

Disco nuevo: Rebelión. ¿Rebelión por qué, contra quién?

[Jorge Martinez, vocalista, compositor y guitarrista de Ilegales] Ilegales siempre ha tenido un significado político, desde Europa Ha Muerto, Tiempos Nuevos, Esta es tu pelea... y eso lo decíamos en 1982, que era un momento de grandes esperanzas. Acababa de desaparecer la censura, los derechos laborales crecían notablemente, la educación pública estaba creciendo, la sanidad se convirtió en universal... ese era un tiempo de avances. Y hoy, 35 años después, España se está convirtiendo en un país casi tercermundista: la sanidad pública ha pasado de buena a deficiente con el anterior Gobierno, han recortado derechos laborales, la educación es menos pública y se favorece la privada... Qué ha pasado con las libertades de expresión, de manifestación Todo se ha ido a la mierda con la Ley Mordaza... Por no hablar de las legiones de prohibidores vocacionales, que se ofenden por todo y te prohíben hablar de todo. Pues nos rebelamos contra todo esto. Y podrán decir mira estos, que vienen ahora con la rebelión como con un panfleto, porque queda bien; pues no, joder, nos rebelamos y pedimos rebelión porque hay sobradas razones para ello.

Este disco suena más duro que cualquier otro disco de Ilegales. Todas las canciones van con un tempo rápido

Esta vuelta a la faceta más punk, más reivindicativa de Ilegales, ¿tiene traslación al sonido, a la estética sonora del álbum?

Sin duda. Este disco suena más duro que cualquier otro disco de Ilegales. Todas las canciones van con un tempo rápido, porque hay momentos para ir lento pero ahora no es uno de ellos: ahora hace falta ir rápido, que el mensaje cale con inmediatez. Es un disco de 29 minutos y pico, menos de media hora en la que decimos muchas cosas sin paja, sin relleno. Un montón de hostias a diestro y siniestro. Como una inyección, las inyecciones siempre duelen pero si se ponen rápido y con precisión entran mejor.

El primer single, Si No Luchas Te Matas, ya es una declaración de intenciones desde el mismo título, pero ¿hay alguien o algo a quien vaya dirigido o es una proclama general?

En realidad, más que un panfleto político es -como todas las canciones de Ilegales- un doble sentido. Hemos revertido radicalmente el himno de Oriamendi, el himno carlista, y le hemos añadido algunas de las lindezas que se oyen en las manifestaciones. Es un poco historicista. Y luego en el estribillo en lugar de hacer el Canon de Pachelbel como hacen todos los nuevos punks, rollo Green Day y demás, lo que hemos hecho ha sido invertirlo, hacerlo disruptivo introduciendo nuevos acordes y tal. Y joder, ha sido difícil porque te vas al Canon inconscientemente, tú que eres guitarrista lo sabes, el cerebro te dirige a los acordes de siempre porque lo tenemos tan inculcado que cuesta salirse de esa estructura. Y se esperaría que del Mi pasásemos al La, pero no, vamos al Sol y cuando ya te esperas que ahora sí que vayamos al Do, pues no, pasamos al Sí. En fin, un juego para desconcertar y mantener alerta. Es que si te apoltronas te mueres. Y en la música está todo tan trillado que hay que conseguir un cóctel diferente y traicionar esos cánones tan manidos.

En la música esta todo tan trillado que hay que conseguir un cóctel diferente

¿Y cuánto de ese juego de traición a lo estándar ha jugado David Morei, el co-productor del disco junto a ti?

Pues mira, es un tío que tiene grandísimas ideas. Vale para todo. A David Morei le pones a hacer fotografía profesional y lo hace de puta madre. El diseño, que es lo suyo, lo hace del copón. Y siempre te aporta ideas interesantes, esto ponlo aquí, prueba a darle la vuelta a esto otro. Además edita de maravilla, y te cuela cada copypaste que flipas, cosas que tú nunca habrías pensado. Está de puta madre. Luego tiene algunos otros defectos, jajajaja. No, pero en serio, compartir producción con alguien así es cojonudo, tú argumentas por qué esto no, él argumenta por qué esto sí, y así hacemos tesis, antítesis y síntesis. Y al final llegamos a un punto que satisface a todo el mundo.

La nota de prensa nos dice que la canción "Mi amigo Omar habla abierta y valientemente de su condición homosexual, sin exhibirla". Cuéntanos algo más...

Sí, es un tío que habla de su condición sexual sin necesidad de exhibirla. Sabes qué pasa Así debería hacerlo todo el mundo. Los homosexuales son un colectivo que históricamente han padecido una opresión absoluta, que se les han negado derechos inalienables, han estado en jaulas, en cárceles. Ahora se ha conseguido la justa y necesaria liberación, pero ahora parece ser que dentro del colectivo hay algunos y algunas que quieren crear una jaula de colores, creando guetos, y moviéndose solo por ciertos ambientes, ciertas zonas... Yo creo que lo suyo es una normalización total, la inmensa mayoría de la sociedad acepta a este colectivo y creo que no deberían enjaularse porque los guetos no son buenos para nadie, ni para las minorías raciales, ni para los músicos, ni para los colectivos de sexualidades alternativas. Toda su fuerza debería estar unida. Y mi amigo Omar es un tipo valiente, y se mueve en todos los ambientes con una soltura absoluta, y a todo el mundo le cae bien. Sin tonterías.

En este disco toca la viola Cristina Gestido porque es la mejor, no porque sea mujer

Quizá esa actitud venga también influenciada por la discriminación positiva, con la impresión de que forzando su visibilidad la normalización llegue antes.

Pues sí, seguramente, pero es que yo creo que la normalización si no es natural no es normalización. Pasa lo mismo con el tema del feminismo, las cuotas. Yo elijo a los y las mejores, sin pararme a pensar lo que tienen entre las piernas. Si esta hace mejor que este el mismo trabajo, pues la pillo a ella. Si este hace mejor la tarea que esta otra, pues le cojo a él. Hay que ser gilipollas para no elegir al mejor. En este disco toca la viola Cristina Gestido, que ha tocado con Sting, con la Ópera de Londres, y la elijo a ella porque es la mejor, no porque sea mujer.

Bueno, yendo a algo más mundano: ¿cómo es que has centrado la primera parte de la gira en salas, en garitos pequeños?

Joder, es que es el sitio. La energía que se desprende en sitios pequeños no tiene nada que ver con pabellones, estadios. Y a ver, en Ilegales llevamos un montaje bastante grande, viajamos 12 personas y ya no podemos ir a los locales pequeños pequeños, pero eso es lo que mola realmente. Ahora vamos a las catedrales, pero sería cojonudo poder ir a las capillas. El contacto con el público es donde está la esencia. Y a ver, luego lo afrontas para dar el 100% independientemente del tamaño del garito... Hemos tocado para ciento y pico mil personas y lo disfrutas igual que cuando tocas para 200 en Zamora. Ahora que lo pienso los conciertos grandes tienen más papeletas para ser más complicados. Nuestro concierto más conflictivo, mira, sólo había 45.000 personas pero antes de la segunda canción ya había 98 heridos. [risas]

Y en cuanto a sonido, ¿qué prefieres?

Bueno, sonamos de puta madre en todos lados, jajajaja. No, en serio, con la gente tan cojonuda que tenemos en sonido, al final sonamos muy bien en casi todos los locales. Tiene que ser un sitio muy muy nefasto para que acabe sonando mal.

En esta gira voy a tener que tocar todo con guitarras Stratocaster

Bueno, venimos de ver a U2 dos noches seguidas en el Palacio de los Deportes de Madrid y, joder, en la pista sonaba bien -aunque algo saturado- pero toda la gente que estaba en grada se ha quejado por h o por b del sonido. Que si cavernoso, que si no se distinguían los agudos, que si mucho eco...

Bueno, supongo que al tener mucha pista, los line arrays tienen que enfocarlos hacia abajo y en los laterales se crean artificios y rebotes raros. Los pabellones no me apasionan en cuanto a sonido, es difícil hacerlos sonar bien. Pero mira lo que te digo, en España tenemos unos locales fantásticos que parece que se van a quedar vacíos dentro de poco. Las plazas de toros. Y joder, suenan de puta madre. No sé si acabarán o no con los toros, me parece peligroso porque van a acabar con las dehesas, que se convertirán en campos de golf, y un montón de especies animales y vegetales van a pagar las consecuencias... No solo las castas de toros, obviamente, que son valiosas y preciosas. Merecen la vida y hay que luchar contra los que se la quieren quitar, pero el tema es complejo. A mi me flipa, la gente ve bien que se mate a un ternero de 4 meses con un transporte traumático, y no dicen ni mu, pero luego se rebelan contra un animal que pasa 4 años viviendo en una dehesa como un rey y que muere peleando. El sufrimiento es equivalente. Yo si pudiera elegiría ser toro y morir matando... [risas]

Bueno, pues hablando de torear, la que te viene encima con el tema de la SGAE...Lo siento, tenía que salir, jajajaja.

Pues mira, hemos presentado la candidatura pero yo he advertido que no quiero ser presidente de ninguna manera, entre otras cosas porque no tengo tiempo dado que mi carrera no está hundida como la de otros compañeros. Con la SGAE lo que estoy haciendo es ir en plan justiciero, estoy ahí para pegarme ostias. Estamos reclamando y, por suerte, parce que este gobierno ya tiene más valor que el anterior...

Bueno, eso con poquito.

Jajajajaa, efectivamente. Pues estamos reclamando que intervengan, que haya una investigación judicial a fondo, estamos gritando: disparad sobre nosotros, el enemigo está dentro. Los ladrones están dentro de la SGAE, están en los sillones directivos. Soy claro con esto y no me ruboriza decirlo; sé que mancha y que me caen piedras, pero me la suda. Estas cosas hay que decirlas, hay que tener cojones.

Un Jorge ilegal nacido en el 90 hoy, ¿haría trap, reguetón o algo por el estilo?

No. No. Seguro. Ese Jorge haría rock como lo hago yo. Esto del rock tiene algo mágico, tío, eso no se puede negar. En mi época no había música de mierda como hoy, pero había canción española, y yo crecí escuchando eso. Yo fui impermeable a la música de la época.

Sí, pero no era tan masivo como ahora. Es que pones una radio, y otra, y un canal de TV musical, y otro, y en todas suena la misma canción.

No no, lo que te digo yo era un bombardeo también. Te juro que era un puto bombardeo. Recuerdo lo que se oía: las lavanderas de Portugaaaal, muchachiiitas encantadoooras. Joder. Antonio Molina, Machín, que no era tan malo pero yo no podía soportarlo, joder. Y los puñeteros pasodobles, tengo fotos de cuando yo era bebé tratando de quitar la radio cuando sonaba esa mierda [risas]

Locales como Gong, La Lata de Zinc o La Antigua Estación son garitos recomendables

Osea, que lo llevas en la sangre, el rock and roll está ahí desde el principio.

Sí, joder. El rock and roll se salía de todo eso, y desde pequeñito quedé flipado. Es que el rock te abre la mente. Y mira que era escasísimo, sonaba una vez cada mil años... Luego empezó a haber algo más, sonaba algo de twist con cierta frecuencia, rock en italiano que me encantaba, y no solo Adriano Celentano: había un grupo que se llamaba Torquato y los 4 que me flipaba [canta un par de estrofas completas en italiano]. Lo sigo escuchando, tío. Eso molaba. Mi filtro mental me dijo, todo esto no, este poquito sí. Y hoy lo mismo, eh. Hay mucha mierda y lo bueno es escaso, las personas con buen gusto para hacer música y para escucharla son escasas.

Exacto, a eso iba. Tú ahora mismo coges a la gente que tiene ahora, no sé, la edad a la que te empieza a tocar de verdad la música, los 12, 14 años... Y estoy seguro de que el 95% de ellos no te menciona ni una banda de rock ni actual ni pasada entre sus 10 bandas favoritas. Y les pinchas ya no te digo un Clash, o un Led Zeppelin, si no algo más accesible. Un Oasis, un pop rock guitarrero suavecito, y te miran extrañados, preguntándose dónde está el beat machacón, la progresión de acordes repetitiva de la que hablábamos antes.

Es que tampoco tienen posibilidades de salir de su círculo. Gran parte de la culpa la tiene el sistema perverso del call-out. Llaman a un imbécil de fuera y le pinchan 10 segundos de una canción para que dé su opinión. 10 segundos. Encima a un tío que no es un especialista. Las ondas radiofónicas se han envilecido un huevo, porque además ya no tienen la competencia tan fuerte que tenían antes: las emisoras libres. Las radios libres ponían la música que les daba la gana y les robaban millones de oyentes a las radios comerciales. No ponían anuncios, se autofinanciaban... Y ponían una música cojonuda. Y una radio en concreto aquí en Madrid llegó a tener más oyentes que la SER. Eso, claro, obligaba a las radios convencionales a ponerse al día y pinchar música más guapa para competir. Pero en ese momento el Gobierno, muy apoyado por el Grupo Prisa, decidió que había que cerrar las radios ilegales para luego abrirlas regularizadas, con la Ley de Ordenación de las Telecomunicaciones del 89. Ahí mataron a la mayor parte de las emisoras, que ya no volvieron a abrir. Cercenaron las ilusiones y el buen hacer de cientos de chavales que estaban haciendo una radio de puta madre y educando musicalmente a la sociedad. Gran parte de la invasión de música de mierda que sufrimos hoy en día viene por culpa de ese cierre.

Hay cantantes que se queman tras unos pocos singles de éxito y no llegan ni a lanzar un album

Sin duda. Pero de cualquier forma solo hay que ver las listas de éxitos, las canciones más escuchadas en el mundo en los últimos 7, 8, 10 años.

Sí, pero son las más escuchadas en formatos digitales, gratuitos o casi gratuitos. Luego esos artistas o no dan conciertos o no llenan una puta mierda. No son rentables. No funcionan, eh. El rock sí que funciona a nivel de negocio, pero por el trap no paga ni si puta madre.

Supongo que tiene mucho que ver con el tipo de público que las escucha y su forma de entender la vida y la cultura. Es gente que ha crecido en el nuevo siglo, en la cultura del todo es gratis, de Emule, de Youtube, de Spotify. La mayoría de artistas surgidos antes del boom de internet vivís casi exclusivamente de los conciertos, no es ningún secreto... Pero esta gente...

Por supuesto. Esa música no es capaz de generar una industria que la sustente. Esos artistas no mueven dinero, su público objetivo no se gasta dinero en verlos en concierto y en el raro caso de que lo hagan, no generan ingresos en barra porque son más de beber un brick de vino del Mercadona antes de entrar al concierto. Así que no creo que tengan gran capacidad de supervivencia como industria, de hecho ya ves lo que ocurre en esos círculos musicales: un relevo brutal, hay cantantes que se queman tras unos pocos singles de éxito y no llegan ni a lanzar un álbum. Duran dos días. Los rockeros sí pervivimos. El rock and roll se va a quedar, joder.

Hacemos en esta gira muchas canciones antiguas con una vuelta de rosca para adaptarlas al hoy

Yendo a algo más cercano, siempre que te he visto en directo tocas una Gibson Les Paul negra. Es tu guitarra fetiche.

Pues fíjate, tengo varias Les Paul, entre ellas esa que comentas, una Supreme que me regalaron los de Gibson en Nueva York... Pero en esta gira voy a tener que tocar todo Stratocasters, eh. Todo un cambio. En esta gira es todo tan rápido y va a tal velocidad que no tengo tiempo a cambiar de modelo de guitarra, voy a tener que usar todo Stratocasters armadas de diferente manera y en diferentes afinaciones, pero con el mismo modelo de guitarra porque no da tiempo a hacerte con la guitarra si cambias tantas veces.

Y en este ritmo vertiginoso del nuevo directo, hay hueco para canciones antiguas de Ilegales.

Sí, el repertorio está muy equilibrado, hacemos muchas canciones antiguas con una vuelta de rosca para adaptarlas al hoy. Pero me gusta mucho el contraste entre el sonido más duro, más seco de las de ahora, con la estética y el sonido de las antiguas. No vamos a ofrecer un puré como muchos otros grupos, una papilla uniforme de todas las canciones pasadas por la misma batidora; vamos a ofrecer un plato combinado con la hostia de sabores. Va a ser tremendo.

Pues cerramos con una pregunta que barre para casa: cómo ves el panorama musical astur? Hay movimiento?

Pues hay grupillos, tío... Más allá de Fe de Ratas y Desakato, que no son mi música ni mucho menos pero sí han tenido cierto éxito, sí que tengo un par de discos recién llegados muy guapos, de dos grupos jóvenes. Están Texuo que hacen un nu-metal muy guapo, el cantante tiene unos registros de la hostia... Y luego los Green Desert Water, con un rollo así de banda de rock entre sureño y psicodélico de finales de los 60, los edita un sello americano y todo. Tela. Bueno, y sobre salas... hay un sitio muy guapo, muy pero muy chulo, que se llama Gong, muy recomendable. La Lata de Zinc, otro garito recomendable. La Antigua Estación en Oviedo, muy guapo... Casa Telva, en la Cuenca, auténtico heavy metal, brutal. Joder, que no estamos tan mal. [risas]

 

Curiosidades sobre Ilegales

1- Jorge Ilegal se extiende al plantearle con qué cantantes, una fallecida y otra viva, querría grabar un dúo o disco: Hay tantas, tío. Es imposible elegir. A ver, nos acaba de dejar Aretha Franklin y eso yo creo que sería un sueño para cualquiera, era la ostia, la puta mejor voz. Billie Holiday, era rompedora, muy expresiva, muy pasional... Y de hoy en día hombre, me gustaría meterle un palo por el culo a Shakira, pero aparte de eso… [risas] Y joder, me fliparía grabar con Françoise Hardy. Qué delicia. [canturrea en francés un par de versos] Todos estábamos enamorados de Françoise en nuestros días. Yo solo por eso estudié francés en vez de inglés, jajajaja. No, pero en serio, las letras en francés de los 60 y los 70 eran mucho más profundas que las letras inglesas. Tú escuchas con detenimiento las letras de los primeros discos de los Beatles y son auténticas gilipolleces, Love, love me do. Pero qué es eso.

2- Siendo menor, pasó por media docena de colegios, siendo expulsado de varios de ellos.

3- En 2018 fue parte junto a Kiko Veneno, Álvaro Urquijo y otros colegas de un grupo que anunció su candidatura a las elecciones a la junta directiva de la Sociedad General de Autores Españoles (SGAE).

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