23 Marzo de 2012 en sala Imagina Club, Cádiz

• · Grupos: Sober.
• · Público: Casi lleno [Unas 350 personas].
• · Precio: 12 euros ant., 15 en taquilla.
• · Promotora: Last Tour iNternational.

Sober, tras una larga ausencia, vuelve. Una de las bandas punteras de nuestra escena metal regresó en 2010 tras 10 años de ausencia. La formación madrileña liderada por Carlos Escobedo revive con Morfologira, su nuevo tour, guiño a su segundo álbum, Morfología [1999] y apuesta por recordar los viejos temas y examinarlos en esta gira ante el nuevo siglo.

Horas antes del comienzo del concierto, docenas de seguidores hacen cola para conseguir buenas posiciones dentro de la sala Imagina, emplazamiento de categoría para una reaparición muy deseada. Se presiente un gran directo y en cuanto abren las puertas, la excitación brota en la extensa cola, cuyo color predominante no puede ser otro que el negro.
Son las once y media de la noche; Sober suben al escenario. El público muestra al instante su apoyo incondicional a estos cuatro curtidos músicos: Carlos Escobedo, voz y bajo, Jorge Escobedo, guitarra, Antonio Bernardini, guitarra y Manu Reyes, batería. Toman posiciones y... ¡comienza el espectáculo!

Respetando el orden de su disco emblema, abren "La Prisión del Placer" y "Loco"; sorprenden porque suelen cerrar su directo con éste segundo tema; sin duda, una buena elección para levantar la sala. Durante las siguientes dos horas repasan todos los tracks que componen Morfología, su disco más contundente, plagado de riffs energéticos y potencia sonora. Destacan cortes como "Cubos", "Condenado", "Predicador"... e incluso se atreven a versionar a unos dioses del heavy metal, lanzándose con "United"; de los míticos Judas Priest; cerrando el primer pase del show con el repaso completo de ese disco al añadir "Lluvia de Dolor". Y durante la interpretación del tema, se meten al público en el bolsillo con pequeños cortes de versiones de Metallica, Lenny Kravitz, Deep Purple y Red Hot Chili Peppers.

Tras este primer y único descanso, vuelven al escenario con un repertorio plagado de guiños al resto de su discografía. Comienzan con "Diez Años", primer single de su álbum más relevante a nivel comercial, Paradÿsso (2002), que fue Disco de Platino. Se observa que crece la energía del público; sorprende la juventud de los asistentes, por ello, se entiende que sean más afines a los discos posteriores a Morfología. También puede deberse este cambio de conducta al factor sorpresa porque todos conocen el repertorio inicial (Mofologira), pero no el resto... Llegados a este punto, el concierto ya les pertenece, lo hacen suyo, siguen las letras y el espectáculo como poseídos. Así, van sonando canciones emblemáticas de Sober como "Arrepentido", "Cientos de preguntas", van entrelazando tracks del resto de sus grabaciones de estudio: Reddo (2004), Superbia (2011)...

Una y treinta de la madrugada. Tras 22 temas y dos horas de actuación, el grupo madrileño concluye con el baño de masas de Carlos y del resto de la banda, guinda perfecta para las primeras filas. Nadie sabe si volverán a pasar 10 años para verles de nuevo y eso se nota en el ambiente.

Hay que destacar la calidad del sonido que logra demostrar Sober en 2012. No es fácil que una banda de metal-rock consiga un equilibrio tan destacable entre potencia y claridad en un local cerrado. Y no todo el mérito es de ellos, también influye el equipo de sonido de la sala Imagina, demostrando que hay muy buenas salas en Cádiz donde caben todo tipo de formaciones y todo tipo de géneros.

También me parece un acierto el repertorio donde el orden elegido de los temas y la actitud de los músicos ha transmitido mucha energía, destacando su honradez al tocar 22 temas para satisfacción de todo el que haya pagado la entrada.

Sober es una gran banda... para sus adeptos. Me explico; desde el comienzo de la actuación, dieron muestras de cierta falta de naturalidad sobre el escenario que a ojos objetivos, y no de incondicional del grupo, es llamativa. Todos los movimientos, mensajes al público, versiones, etc. subrayan a distancia que están más que preparados [como es lógico y normal en bandas de este caché y nivel] para seguir en gira pero falta sintonía si no se pertenece a su círculo de seguidores.

Su puesta en escena incluye demasiadas poses sobrecargadas como si quisieran conseguir un espectáculo de estilo Shock Rock propio de maestros de este género como Alice Cooper, Kiss, W.A.S.P. u Ozzy Osbourne y... si es así, por favor, que dejen de hacerlo, se nota a leguas que no lo sienten de verdad y eso puede tener un efecto lamentable.

Que me disculpen los seguidores de Sober pero una gran banda de metal-rock es capaz de meter en la fiesta a cualquiera que pague su entrada y comprobé que muchos en la Imagina no llegaron a notar ese arrebato que te hace botar sin freno, gritar de placer y sentir el pellizco del metal.

He asistido a un buen concierto, cierto pero en ningún momento he visto a una grandísima banda del metal-rock español como muchos pretenden...
Si Sober tarda 10 años en volver de nuevo, no los echaré de menos.

Foto: Sober, preparándose para "darlo todo"

Foto: Sober en acción... sobran poses sobrecargadas