20 Mayo de 2011 en sala Capitol, Santiago de Compostela, A Coruña

• · Grupos: Nacho Vegas + Refree
• · Público: Lleno, ENTRADAS AGOTADAS [unas 850 personas]
• · Precio: 12 euros anticipada/ 16 en taquilla
• · Promotora: Heineken Music Selector.

Estuvimos con Nacho Vegas en la acampada del 15 M en Santiago, en la Praza do Obradoiro, el día de reflexión tras su bestial actuación en una sala Capitol llena. Allí anunció: "Nos vemos todos luego en el Obradoiro". Lo dijo y lo cumplió. Esta es la crónica de algo más que un concierto, de una noche donde las canciones del cantautor astur le guiñaron el ojo a un estribillo cada vez más compartido: Democracia Real Ya.

"Es imparable, imparable...", nos comenta Nacho Vegas. Son las tres de la mañana, Santiago de Compostela, Praza do Obradoiro, Día de Reflexión. Hay unas 500 personas acampadas, un furgón policial mira en silencio. Nos encontramos allí con Nacho y parte de su banda. Alude entusiasta al movimiento 15 M. Ha llegado a la capital gallega desde Madrid donde lo ha visto a pie de calle. "Si lo ves allí... hay un ambiente increible", dice con el entusiasmo contenido propio de los tímidos de corazón.. "En Gijón están acampados en la Plaza Mayor...", añade apelando a su ciudad natal en una noche que ha empezado antes. Retrocedamos.

Ignacio González Vegas [Gijón, 1974], Nacho Vegas en 2011 equivale a decir... lleno, entradas agotadas, sold out. Su gira presenta La Zona Sucia, nuevo disco que abre su etapa en Marxophone, discográfica donde es cofundador. Se juega su dinero, los tiempos cambian, dijo Dylan, [y más que van a cambiar].

Llegamos sobre las diez y media. El enjambre de gente alrededor de la entrada subraya el lleno. Entramos. En el baño de mujeres hay cola, dentro tardan más de lo habitual. Nacho está en la ciudad y varios rostros en la Capitol lucen más rimel del habitual. Está actuando Raül Fernández, Refree. Entre saludos en el hall y demás, cuando abrimos la puerta de la sala vemos que ya no está.
Entre los conocidos vemos a Ricardo Gargía Carrión. Publicamos una foto suya en "el Ferrero Rocher del pop", crónica del concierto de Delafé y las Flores Azules en esta misma sala hace unos meses. "Nacho tiene una banda muy buena", apunta cuando le decimos que nos gustó en su última visita pero nada cuando vino con Christina Rosenvinge.

Once y cinco minutos. Sale Nacho y la banda: Luis Rodríguez, bajo; Abraham Boba, teclados y acordeón; Manu Molina, batería y percusión; y Xel Pereda, guitarra [con quien comparte el proyecto paralelo de folk astur Lucas 15].
Arrancan con "Cuando te canses de mí". Al minuto queda claro que la llegada de Abraham al grupo les da un salto de calidad a nivel de sonido, aportando muchos matices luminosos. A los dos minutos, ovación espontanea tras el estribillo.. "Y ahora que sigues aquí cómo no vas a cansarte, si de miércoles a martes, ya estoy harto yo de mí".
Es una canción del nuevo disco. Hay quien dice que habla de Rosenvinge, poco importa. El nuevo album centra el concierto.
Enseguida, late el punto de luz que define a este nuevo trabajo. El apoyo de un piano juguetón hace que Nacho gane empaque en directo. Camisa blanca, chaqueta oscura, su justita voz puesta en su sitio, sin alardes [¿solo a nosotros nos recuerda a Aute?], bien arropada a nivel instrumental y de coros, gastando buena dicción algo que se agradece cuando estamos ante uno de los mejores letristas del pop rock actual... el músico astur, sí, [se] crece.

Al cuarto de hora, tras beber de un botellín de agua, Nacho dice: "Gracias, buenas noches, estamos contentos de tocar aquí, en esta sala tan chula, una de las más chulas que hay, es un placer tocar aquí...". Aplausos. Retoma: "Gracias por estar aquí, es el segundo mejor lugar para estar en esta ciudad después de la Plaza del Obradoiro, nos vemos luego todos en el Obradoiro..." Aplausos aún más intensos. Está claro, hay cosas más importantes que la música. Conviene recordarlo.

Escuchamos "Reloj sin manecillas", otra de las nuevas. Luego el tracklist viaja hacia un ayer medido en varias distancias: "Hablando de Marlene", del EP Esto no es una salida [2005]; "Ezequiel", del disco Cajas de música difíciles de parar [2003]; y "Dry Martini SA", del Ep compartido Verano Fatal [2007].
Novedad en escena. Invitado por Nacho, Raul Refree vuelve. Acústica en mano, hacen a dos voces la simpática pero significativa "Canción del anarquista", tema de Chicho Sanchez Herlosio que también es conocido como Gallo rojo, gallo negro.

Al tocar "Perplejidad" [que mejora sin coro infantil], el concierto regresa a su eje natural, los cortes de La Zona Sucia, cuya traslación al directo se beneficia de ese seguro de vida que son las guitarras de Pereda. Tensa, intensa, la banda sigue sonando muy bien, sin bajar la guardia ni un instante.
La polivalencia de Boba, ayuda y cuando toca el acordeón pinta un cálido toque arrabalero. Nacho suena menos folk que en giras previas. Toca casi todo el rato con la guitarra eléctrica, y así se refuerza el sonido siempre al servicio de sus historias, sus histerias, sus neuras y sus norias.

"Me he perdido" empieza con el banjo alegre de Pereda y pone un punto de frescura igual que "El hombre que casi conoció a Michi Panero" lo pone de alegría, sobre todo entre quienes echan de menos otros clásicos del repertorio de Nacho Vegas previo a La Zona Sucia. El maravilloso crescendo de ese tema indica dónde se corea el... "y cuando digo no... es no", demuestra que sin excesos, el show se va [en]volviendo más enérgico.

Ya en el bis, salió también Raul, "porque si no toca se vuelve loco", dice bromeando Nacho, y añadiendo: "Vamos a hacer ahora una versión de un chico que está empezando...". Humor, amor, sueños, desvelos se van mezclando y el autor, cantautor, hace que vuelen letras propias y guiños a palabras ajenas donde muestra un discurso cada vez más cuajado. Volviendo al humor, presenta a la banda y a los roadies con chistes como... "A la derecha pero más allá, digamos que la ultraderecha, o sea, Intereconomía, está..."
Entre los ocho o nueve temas del reciente lanzamiento, tampoco falta "Lo que comen las brujas" [insisto, otra letra que gana sin el coro infantil].

Al caer "Taberneros", media sala canta... "Ya se fue mi amor, lo sentí marchar, esta noche me voy a emborrachar". En ella, Nacho presenta a un roadie gallego que ahí ayuda en los coros. Luego llega "La gran broma final", siguiendo la línea ascendete de las dos horas de concierto, para acabar en alto, incluyendo un soberbio cierre con un desbarre sónico de toda la banda con el sonido altísimo pero perfecto como si cruzara la sala un truendo de eco extenso, recordando su etapa en Manta Ray y acabando con un gesto extraño en el traje del perfil de su timidez: lanzando la guitarra al suelo casi sin querer, ejemplo de que no tiene alma para el heavy aunque sí para algunas métaforas duras y crudas como el hierro.

Antes del último tema, se despide con otro apunte divertido. "Bueno, gracias, nos vamos, que todavia llegamos a tiempo de ver "El Gato Al Agua".
Una de la noche, concierto acabado.

Varios tragos y bares después, visitamos por segunda vez en la noche la acampada del 15 M en el Obradoiro y vemos a Nacho Vegas. Le felicitamos, le explicamos la cara de agradable sorpresa de César Verdu [técnico y miembro de Schwarz] al felicitarle.

_La Ganzua: "¿Podemos hacerte una foto en el centro de la plaza?"
_Nacho: "Sí, claro... pero hacérmela yo solo, no sé..."
_La Ganzua: "Perdonad, ¿conocéis a Nacho Vegas?"
_Pareja anónima: "Sí, sabíamos que hoy estaba aquí pero no hemos ido porque estábamos aquí..."
_La Ganzua: "¿Podemos haceros unas fotos con él? Son para La Ganzua, una revista de música independiente donde hemos puesto mal a Nacho varias veces aunque desde hace tres años siempre le ponemos bien, y se lo merece..."

Así que hacemos las fotos, con la complicidad de un Nacho que luce sonrisa socarrona. Nos comenta la ilusión que le produce todo lo que está pasando. "Es imparable...", dice. Aludimos a la incorporación de Boba a la banda. "Sí, es un músico buenísimo...".

Para buenas, algunas letras de Nacho Vegas. En días de sueños, optamos por ésta deseando que un día se pueda decir del 15 M: "Era un sueño y ahora es real".

<< Hoy soñé que te tenía otra vez entre mis brazos
de saber que no era más que un sueño,
no me habría despertado
así que si hoy amaneces,
y los pies te están doliendo
es porque estuviste toda la noche,
Caminando por mis sueños...>>

[fragmento de "Taberneros", de La Zona Sucia]

Foto: Nacho Vegas, visitando la acampada del 15M en Santiago tras actuar en la sala Capitol