26 Julio de 2017 en Praza da Quintana, Santiago de Compostela, A Coruña

• · Público: Unas 3.000 personas.
• · Precio: Entrada gratuita.
• · Promotor: Festas do Apostolo - Fiestas del Apóstol. Concello de Santiago.

Dorian llevan meses con una gira llamada Diez Años y Un Día que, visto el concierto de Santiago de Compostela, debe retitularse así: Mil años y un día.
Esta noche han sabido adaptar su repertorio y actitud al clima alegre que exige toda fiesta, en este caso, las Festas do Apostolo en la capital gallega, para ofrecer más que un concierto... una hermosa huida convertida en pop.

 

Dorian no son oscuros pero visten de negro. Sí son amigos del azul, del sol en la boca que a veces es mordido por la noche, de los arrecifes y los volcanes, de los amores rotos y los trozos repuestos, de heridas, avenidas y mañanas donde levantarse de nuevo para salir a la calle a robar un beso. Pop, algo oscuro, vida, algo oscura. A todo ello cantan Dorian. Antes, salieron Calo Vento, ese duo en alza que derrocha intensidad en directo [el batería se sale] pero que ganaría si fuesen capaces de afinar al cantar.

Dorian en vivo: Quinteto en escena, telón de fondo con su logo y un equipo de luces notable, seguramente con técnicos propios. La primera impresión indica que la noche no solo tiene estrellas en el cielo. Cuidar fondo y forma, esa es la receta del grupo que lideran Marc a la voz - guitarra y Belly ("la comandante de todo", Marc dixit) a los teclados liderando música pop de ritmos capaces de saltar mil y un obstáculos.

Foto: Belly saluda en una de las raras veces que en vivo levanta la vista del teclado

En el arranque suena la "Tristeza", canción extraída de La velocidad del vacío, ese cuarto disco que supuso para este grupo catalán avanzar veinte pasos de golpe. Ese inicio vuela sobre un logrado estribillo: "Tristeza, la llevas dentro cómo explicarte lo que siempre siento".
La música de Dorian no se alimenta solo de tristeza pero sabe convivir con ella, sus colores, sus dolores. Sus historias hablan de ti, de mi, con Marc, muy activo en escena desde el primer minuto, es fácil identificarse, compartir, huir a ritmo de un repertorio lleno de texturas, de teclados que reparten olas de azules, rojos, negros, noches y agujeros en el bolsillo.
En ese tercio inicial del concierto también cae "Verte amanecer", cuyo protagonista cree antes que en Dios... en los ojos de ella porque dioses y diosas hay muchas pero amores hondos pocos, por eso entiendas que huya tras ellos.

Foto: Dorian con su habitual puesta en escena en la gira Diez Años y Un día

Hablando de sentires, tras saludar, dar las gracias e incluso soltar alguna frase en gallego [respeto se llama esa actitud], Marc anuncia un viaje y llega "La Ciudad Subterránea", cuyos pasajes instrumentales airean letras que dejan poso, peso.
Saltando, pidiendo aplausos desde el primer tema, Dorian avivan así la hoguera de la fiesta. Y recuerdan que Santiago es "una ciudad especial" para ellos, porque en el Santirock de 2004 dieron su "primer concierto en un gran festival" y porque luego han tenido buenas noches "en la sala Capitol". Brota la complicidad con el público en un concierto donde a los 40 minutos empiezan a llegar los hits para el karaoke de muchas gargantas veinteañeras, más de ellas que de ellos, y para el baile vitalista, más de ellas que de ellos.

Tocan "La tormenta de arena", con coro general y hombros abandonados a la espiral de las corrientes circulares. Suenan bien, y además las luces matizan cada emoción de sus canciones. Dorian se crecen y la gente es feliz. Trazan otro subidón al tocar "La Mañana Herida" y su... "Cuando la mañana herida te lleve lejos de aquí.... dirás que el mundo niña no está hecho para ti..." y la sentencia del... "¡Joder que puta es la vida, que difícil la huida, voy a ir a Madrid!".
Y si entre los tempos lentos sobresale "Arrecife" [con un logrado crescendo], entre los medios, destaca además "Hasta Que Caiga el Sol", historia de amor cuyo videoclip tiene como protagonista a Kira Miró.

No falta tampoco "El temblor", otra letra que habla de derribar muros, emocionales, fisicos, mentales o imaginarios. Igualmente tocan otra canción esperada, "Los amigos que perdí", esa que grabaron con su paisano Santi Balmes, el líder de Love of Lesbian. Elevando aun más el clima festivo al lanzar globos blancos gigantes desde el escenario.

Entre las canciones más coreadas se cuela "Cualquier otra parte", cuyo clip, por cierto, tiene como actores a Daniel Brühl y María Valverde, pareja con la que irse a cualquier parte, igual que haríamos con Marc, Belly y el resto de Dorian en una gran noche donde solo faltó que salieran a hacer el bis claro que... es entendible su ausencia porque empezaron un miércoles a las 23.45 horas y acabaron a las 01:06 h., ya con apenas mil personas en la Praza da Quintana porque al día siguiente tocaba madrugar. El pop, la vida, esa hermosa huída nunca para.