10 de julio de 2025 en Kobetamendi, Bilbao

• Parte de los artista y grupos: Pulp, Bad Gyal, Kylie Minogue, Amaia, Michael Kiwanuka, Nathy Peluso, Raye, Japanese Breakfast, Alcalá Norte, Carolina Durante, Fat Dog, Damiano David, Orbital, Judeline, Cala vento...   
• Lugar: Recinto Kobetamendi (Bilbao).
• Público: Unas 115.000 repartidas en 3 días.
• Promotora: Last Tour.

El festival Bilbao BBK Live 2025 ha juntado en tres días a más de 115 000 personas, según datos de la organización. A lo largo de las tres jornadas, el sábado se convirtió en el día de mayor afluencia, consolidando esta edición como un referente en diversidad generacional y musical. Aunque cierta desorganización en el servicio de autobuses dificultó la llegada puntual de muchos asistentes, la energía y la calidad musical devolvieron la emoción dando pie a una tarde-noche intensa y variada.

El festival Bilbao BBK Live 2025 empezó el jueves con un retraso inicial en la apertura de puertas (sobre una hora) debido a fallos técnicos en los lectores de códigos QR de las pulseras. A pesar del retraso, se mantuvieron los horarios y la duración de los conciertos,

El clima del primer día de conciertos en el Bilbao BBK Live 2025 acompañó con temperaturas suaves, brisa agradable y un atardecer limpio que favoreció la experiencia general. Eso sí, el viernes, la lluvia truncó la actuación nocturna de Amaia.

Retomando esa primera jornada del jueves en el Bilbao BBK Live 2025, Japanese Breakfast ofreció frescura, vaporwave y cercanía con el público joven. Con el sol aún iluminando las laderas de Kobetamendi, Japanese Breakfast dieron un bolo marcado por el carisma de Michelle Zauner, quien generó una gran complicidad con el público durante toda la actuación.
Su pop alternativo fue un soplo de creatividad y sensibilidad que encajó bien en el arranque del festival. Usó de visuales vaporwave y tonos pastel para reforzar la atmósfera estética.  

Michael Kiwanuka, voz principal y guitarra, actuó con una banda estable con batería, bajo, guitarra rítmica y teclados, más el acompañamiento destacado con un cuarteto de cuerdas (violines, viola y chelo), tres coristas soul/gospel (dos mujeres y hombre) para enriquecer armonías y profundidad vocal, sumando hasta 10 personas en el escenario del Bilbao BBK Live 2025.

El concierto de Kiwanuka coincidió con un atardecer dorado sobre el monte, que envolvió la actuación en una atmósfera mágica y cinematográfica. El sonido era cálido y matizado, con los arreglos de cuerdas subrayando los momentos emotivos. Inició con "Cold Little Heart", una apertura hipnótica que capturó rápidamente la atención del público. Logrando momentos culminantes en "Black Man in a White World", donde miles de palmas marcaron un ritmo contagioso bajo un cielo teñido de violeta y "Home Again", canción especialmente íntima y muy celebrada (y cantada) por el público).

Kiwanuka agradeció la entrega y respeto del público durante un show que fue un momento de comunión y envolvimiento musical, juntando a mucho más público del que yo esperaba.

Pulp aparecieron con Jarvis Cocker como voz principal y percusiones menores; más una banda con dos guitarras, bajo, batería y teclados/sintetizadores.

Pulp hicieron en el festival Bilbao BBK Live 2025 un setlist con varios temas clásicos como "Common People" (cierre épico), "Disco 2000", "Babies", "Do You Remember the First Time?", "Sorted for E’s & Wizz", "This Is Hardcore" y algunas sorpresas como "Farmers Market" y "Got to Have Love".

Con el escenario Nagusia a reventar, el concierto de Pulp se convirtió en una celebración colectiva. Jarvis, fiel a su teatralidad, repartió bombones al público (“No quiero que se derritan en mis manos, mejor que se derritan en las vuestras”), generando un gesto cálido y festivo que fue muy bien recibido.

Pulp usaron visuales sencillos pero efectivos y un sonido robusto completaron un concierto que revalidó a esta icónico grupo de brit pop como una banda capaz de unir generaciones bajo el mismo estribillo. Su concierto en el Bilbao BBK Live 2025 fue una fiesta al ritmo de las citadas "Disco 2000", "Babies" y ese "Common People", todo entre saltos y un karaoke multitudinario.

La lluvia cortó este viernes 11 de julio el concierto de Amaia en el Bilbao BBK Live 2025. Sucedió, cuando, pasadas las diez de la noche, los chubascos, unidos al viento, obligaron a cortar, por seguridad, la actuación de la cantante navarra.

Carolina Durante: el salto al escenario principal.
Carolina Durante, banda ya consolidada y habitual en ediciones previas del festival, vivió su primera actuación en el escenario principal. Este cambio de dimensión se notó en la abarrotada audiencia que esperaba ansiosa su propuesta fresca y directa y disfruto con intensidad su mezcla de punk y pop con letras cargadas de crítica social y humor.

La formación sobre el escenario estuvo compuesta por Diego Ibáñez (voz principal, apoyado en muleta aun convalenciente por una operación reciente), Mario del Valle (guitarra), Martín Vallhonrat (bajo), Juan Pedrayes (batería), acompañados de dos músicos invitados para sección de cuerdas y trompeta.

Abrieron con "Joderse la vida", tema emblemático que inmediatamente conectó con el público. A lo largo del concierto repasaron canciones como "Misil", "San Juan" y cerraron con dos himnos: "Perdona (Ahora sí que sí)" y "Las canciones de Juanita".
El grupo recreó una sala de oficina con ambientación de post-its, archivadores y máquina de café, incluyendo una bandera de Palestina junto a los amplificadores como gesto simbólico de solidaridad.
 
L’Impératrice: elegancia y sofisticación en el pop francés.
El sexteto francés, liderado por su nueva vocalista Louve ofreció un directo elegante y bailable, con una formación que incluyó bajo, guitarra, batería, teclados y sintetizadores. El repertorio combinó temas de su nuevo álbum Pulsar con clásicos como "Anomalie bleue". El espectáculo destacó por su cuidada estética retro-futurista, con visuales geométricos y luces de neón que reforzaron su estilo disco-funk y pop electrónico y el público disfrutó de su energía en directo y su capacidad para crear una atmósfera festiva sin perder sofisticación.

Kylie Minogue: glamour y elegancia en múltiples actos.
Kylie Minogue ofreció un show elegante y cuidado, acompañada por una banda completa formada por guitarra, bajo, batería, teclados y percusión, además de ocho bailarines que llenaron el escenario de energía. Durante el concierto hizo entre seis y siete cambios de vestuario, desde looks brillantes y llamativos hasta estilos más sobrios, mostrando distintas caras de su trayectoria. Sus coreografías fueron más simples y relajadas que en sus mejores años,  y aunque recurrió a voces preregrabadas en algunos momentos, su voz en directo se mostró solvente y con carácter. El repertorio repasó éxitos clave como "Lights Camera Action", "In Your Eyes" y "Can’t Get You Out of My Head", cerrando con "Padam Padam" y "Love at First Sight". El espectáculo, que incluyó pantallas, LED y luces láser, fue una auténtica fiesta disco al que el público, respondió con entusiasmo y energía, disfrutando cada tema como un verdadero homenaje al glamour de Kylie Minogue.

Nathy Peluso: poderosa.
La argentina impuso su presencia con una voz poderosa y una energía que no dio tregua. Acompañada por su banda —batería, DJ, teclados y dos bailarinas— desplegó un show vibrante y lleno de teatralidad, mezclando sin esfuerzo electrónica, hip hop, soul y flamenco. Comenzó con la fuerza de "Business Woman" y siguió navegando entre ritmos como "Ateo", "Mafiosa", o "Envidia", incluyendo una versión del "Morir de amor" de Camilo Sesto que conectó con el público de todas las edades.

Con actitud segura y de mujer libre y empoderada, Nathy domina el escenario con una entrega total. Su último álbum, "Grasa", quedó más que confirmado como un trabajo lleno de talento y pasión, y Peluso como una de las artistas más contundentes y auténticas de la escena actual.

Fat Dog: el punk británico en estado puro.
Fat Dog, sexteto británico, contó con formación típica de punk: guitarra, bajo, batería, voz y posiblemente teclado o segunda guitarra. El setlist incluyó "Vigilante", "Show Me the Way" y otros temas que hicieron vibrar al público hasta el final. La iluminación blanca y el logo de la banda proyectado al fondo contribuyeron a un espectáculo directo, sin artificios, que reflejó la esencia de su música y su propuesta estética.

Apuntar además, que la nueva disposición del recinto incluyó un cambio del escenario de entrada (Escenario Repsol), a costa de la desaparición del pequeño y palco Firestone, que había servido para artistas emergentes. Se gana en comodidad y accesibilidad, aunque se echa de menos ese espacio para bandas más pequeñas que a veces eran muy interesantes.

Otros rasgos del festival Bilbao BBK Live 2025, hubo precios y servicios en el recinto como la Caña de Cerveza a 5,5 €, refrescos a 4,5 €, kalimotxo grande a 12 €, un sistema cashless activo y fluido; y colas en barras y baños razonables, aunque puntualmente largas en horas punta.