Grace Jones, Jungle y Arcade Fire, lo mejor del Bilbao BBK Live 2024
Por: Roberto García López - LA GANZÚA
Los conciertos de Grace Jones, Jungle, Arcade Fire, Massive Attack, Air, Los Planetas, Underworld, Alcalá Norte... han destacado en el festival Bilbao BBK Live 2024 que se ha celebrado durante los días el 11, 12 y 13 de julio de 2024, juntando a 110.000 personas, repartidas entre las tres jornadas, según datos de la organización.
11 Julio de 2024 en Kobetamendi, Bilbao
- Artistas y grupos: Arcade Fire, Jungle, Massive Attack, The Prodigy, Underworld, Khruangbin, Parcels, Alvvays, Ezra Collective, Mulatu Astatke, El Columpio Asesino, Los Bitchos, Folamour A/V, Sen Senra, Death from Above 1979, Overmono, JPEGMAFIA, Noname, Zea Mays y Ralphie Choo.Shygirl presents Club Shy, Lewis OfMan, Alcalá Norte, Gabrielle Kwarteng, Stivijoes, Alba Morena...
- Lugar: Kobetamendi (Bilbao)
- Promotora: Last Tour.
- Público: Unas 110.000 personas sumando los tres días, según la organización.
Los conciertos de Grace Jones, Jungle, Arcade Fire, Massive Attack, Air, Los Planetas, Underworld... han sido parte de lo más destacado en el festival Bilbao BBK Live 2024 que se ha celebró durante los días el 11, 12 y 13 de julio de 2024, juntando a 110.000 personas en Kobetamendi, repartidas entre las tres jornadas, según datos de la organización, resumiendo una entrega del festi que ha tenido un programa paralelo por Bilbao (Bereziak) con muchas actuaciones de entrada libre, algo de lo que bien pueden tomar ejemplo otros grandes eventos. Y LA GANZÚA ha estado allí para contarlo desde dentro, ¡vamos allá!
_Conciertos BBK Live 2024 del jueves 11 de julio, PRIMER DÍA:
En busca de vivir in situ al primer día de conciertos del Bilbao BBK Live 2024, nos acercamos primero, a las 19 h. al estadio de San Mamés, lugar de salida de los autobuses que llevan a las campas del monte Kobetas. Hay larguísimas colas para la recogida de pulseras que se mueven rápidamente gracias al numeroso personal que gestiona la recogida y se aprecia una la buena organización. Nos vamos a la parada de los buses y de nuevo brotan largas colas, pero esta vez no va todo tan rápido, a pesar de la gran cantidad de autobuses moviéndose, tenemos que esperar casi una hora a que nos toque turno. Al llegar arriba, el acceso al recinto es ágil. Tras comprar algo de bebida (vaso reciclable a 3 euros; cerveza a 5 euros; kalimotxo a 5,5 euros; katxi cervecero a 10 euros; y katxi kalimotxero a 11 euros) de), llegamos justo a tiempo de ver el concierto de Air, que es nuestro primer objetivo del día.
Empiezan puntuales a las 21:30 en el escenario San Miguel, el segundo más grande del Bilbao BBK Live 2024.
Air aparecen en escena dentro de una gran caja rectangular blanca y vestidos completamente del mismo color. La banda gala, todo clase, empieza a desgranar pausadamente las canciones del álbum Moon Safari, eje de su actual gira. Y suenan "Remember", "Kelly watch the stars", "Sexy boy" (muy coreada por el público), "venus" y "Run". Caviar francés en un ambiente de fiestas de pueblo. El grupo formado por Jean-Benoît Dunckel y Nicolas Godin se acompaña sólo de una joven batería, pero no les hace falta más. Los sintetizadores acompañados ocasionalmente por una guitarra acústica o un bajo llenan de ricos sonidos todo el recinto bilbaíno. Suenan además "Highschool Lover" y "Dont be Light", una delicia, Aún así, el ambiente es frío y el grupo no interacciona con el público. Los más jóvenes se van buscando un buen sitio para ver a Massive Attack, (que, parece ser que no dejaron hacer fotos del show a la organización ni a la prensa) y quienes nos quedamos a ver a Air disfrutamos de una hora de pura belleza músical, música indie pop y electrónica acompañada por una elegante y efectista escenografía. Después de desgranar, uno a uno, los temas de "Moon Safari", Air se despiden con un tema de la banda sonora de "Las virgenes sucicidas", la película de Sofía Coppola.
A estas horas todas aquellas personas han subido a las campas de Kobetamendi ya está posicionadas para ver a Massive Attack que actúan en el escenario principal. Unas 40.000 almas calculamos que están deseando moverse y saltar al ritmo de la banda inglesa, iconos del triphop. El concierto comienza puntual con un sonido limpio y atronador que te empuja desde el pecho. Una gran pantalla al fondo del escenario empieza a mostrar imágenes y videos de guerra de Gaza, Ucranía, Irak... que se entremezclan con otras banales y festivas de la vida cotidiana en cualquier país de occidente. Y así, van pasando los temas con un tono oscuro, casi onírico, sin apenas interacción con el público salvo un "ezkerrik asko" al terminar una canción. Suena "Voodoo". El concierto se vuelve triste con todos esos visuales de guerra y miseria que nos golpean desde la gran pantalla. La música lo acompaña, lo respalda, lo enfatiza. La gente adolescente y veinteañera ha venido al Bilbao BBK Live 2024 a bailar y a divertirse, pero no va a ser hoy o, no ante, Massive Attack.
Todos los mensajes que aparecen en la pantalla acompañando a los clips están en euskera. Un chaval a mi lado me pregunta si sé euskera. Le traduzco lo que leo: "Israel ha recibido desde 1943 miles de millones de dólares de ayuda extranjera". Terminado el concierto, la gran pantalla se apaga y suena "Teardrop", justo cuando empieza a llover en Bilbao. El público se anima, por fin va a poder bailar y saltar pero el tono de la actuación no cambia. Sigue siendo frío, oscuro pero impecable. Sin un bis y apenas un saludo, la numerosa banda de Bristol (Inglaterra) ha combinado hiphop, jazz, soul y electrónica sobre el escenario pero nos ha dejado un poso de tristeza en el alma. Cierra el concierto puntual a las 00:30 horas.
Y con ganas de animarnos, nos acercamos a ver a Los Planetas que tocan en el segundo escenario. Llegamos tarde pero desde la distancia oímos como suenan los temas de su álbum "Super 8", del que se cumplen 30 años. Historia del indie rock nativo, su caso también se suma a la exitosa moda de hacer giras basadas en un álbum de fama, parece que el ayer cotiza al alza. Es la 01:00 y un público más adulto llena ese concierto de la banda granadina. Muchos han venido sólo por esto, Los Planetas, tienen fans de mucha entrega. Suenan las canciones de ese influyente álbum y, entre medias, Jota, su líder se gana al público con menciones al Athletic Club de Bilbao y a Nico Williams. Su voz ha tenido tiempos mejores pero, se las sabe todas, y demuestras ganas de agradar, acompañado en todo momento de un público que canta todas las canciones, hits de nuestra escena indie como "Si está bien", "Que puedo hacer"... y para concluir, "Desorden". Los Planetas se van pero el público quiere más, desea más, y el grupo andaluz responde volviendo para tocar "David y Claudía". Otro par de temas clásicos y nueva salida del escenario. Nos mantenemos firmes y casi podemos decir que obligamos a que hagan un segundo bis, alargue que termina con "Un buen día", dejando para nosotros un buen sabor antes de volver a casa.
_Conciertos del BBK Live 2024 del viernes 12 de julio, SEGUNDO DÍA:
Hoy nos acercamos con un poco más de tiempo a los autobuses que suben a las campas de Kobetas. El resultado es el mismo, más de una hora de espera y la gente, claro, empieza a enfadarse con la lentitud del servicio. Con el tiempo justo llegamos para ver a un trío tejano de nombre impronunciable Khruangbin. Sobre el escenario bajo, batería y la omnipresencia de la guitarra de Mark Speer van desarrollando una música principalmente instrumental de influencias que van desde el funk a la música oriental. Ofrecen largos temas instrumentales que se encadenan sin pausa y una presencia que no llena el enorme escenario principal. El público acompaña cantando sus temas en castellano, caso de "Como te quiero" o "Pelota", y se pone a bailar con "Lady and Man"...
Sobre el único escenario cubierto del Bilbao BBK Live 2024, aparece luego Albert Pla y la Surprise Band para presentar "Rumbagenarios", un show repleto de rumba, salpicado de electrónica y flamenco, un repertorio inclasificable, como el propio Albert. Mezclan canciones de siempre, del primer disco del artista catalán y otras recientes no grabadas todavía. Pla es uno de esos pecados inconfesables. Tras una engañosa fragilidad consigue inmediatamente conectar a todos los presentes con sus desquiciadas historias. Sus versiones de "Walk on the Wild Side", de Lou Reed o "Experiencia Religiosa", de Enrique Iglesias acaban en una comunión completa artista-público.
Entre medio, hay tiempo para que brille la guitarra flamenca de Diego Cortés, los sonidos electrónicos de Judit Farrés y el talento de las tres jóvenes mujeres de la Prenda Roja: Cristina López, Ana Brenes, Sara Sambola. Para cerrar en todo lo alto, Albert Pla se despide de Bilbao con una versión de "Soy rebelde", de Jeanette, un cover que le dio mucha fama al cantautor de Sabadell fama porque fue incluida, con él cantándola, en "Airbag", película de Juanma Bajo Ulloa que arrasó en las taquillas a finales de los años 90.
El festival va a más cuando Grace Jones aparece en el escenario principal de KobetaMendi. Sale con media hora de retraso, que para eso es una diva de la música y la moda. Desde el primer momento deja claro que en Bilbao ella es la jefa. Nadie abajo puede creer que a sus 76 años pueda moverse con esa fuerza sobre el escenario. Mantiene una voz profunda y potente en un cuerpo de decatleta que contorsiona sobre el escenario.
Propone una fusión de disco y ritmos caribeños con una numerosa banda que va tocando todos sus temas clásicos. "I've Seen That Face Before (Libertango)" suena tan bien como hace cuatro décadas. A cada nuevo tema, Grace Jones desaparece por unos segundos del escenario sin dejar de comunicarse con el público y aparece con un nuevo y más exótico (si cabe) vestuario. Todo forma parte de su espectáculo que se cierra, como no podía ser de otra manera, con "La vie en rose", el clásico de la canción francesa con letra de Edith Piaf que elevó a la artista jamaicana a los altares de la música disco como sucesora de Donna Summer de la música disco que arrasó entre finales de los años 70 y los primeros 80.
En este segundo día del Bilbao BBK Live 2024, las actuaciones en Kobetamendi encadenan retrasos y cuando estamos esperando la salida de Meute se nos comunica que lo hará 45 minutos más tarde del horario marcado. Es verano en Bilbao, es decir, a 16 grados y la espera nos deja fríos hasta que a la hora señalada aparece la banda alemana sobre el segundo escenario del festival. Y nunca mejor dicho lo de banda. Meute es una charanga de once músicos con trombones, trompetas y bombo que hacen música de electrónica sin gastar un amperio a Iberdrola. Y como tal charanga se mueven por el escenario, ataviados con trajes regionales alemanes. Es una propuesta divertida pero que a la media hora se hace un tanto monótona por abusar de una formula muy repetida. Los temas se encadenan sin pausa y cuesta diferenciar unos de otros. Pero, es verdad, que consigue poner a bailar al público del BBKLive, y eso hay que aplaudirlo.
Termina la noche a la espera de ver el concierto de Underworld. Su set list comienza en el escenario principal con 30 minutos de retraso pero lo hace de un modo atronador. Desde el primer minuto, todo el público se pone a saltar con "Two Months Off". Hyde y Smith no han perdido ni un ápice de su pegada desde que los descubrimos en la película "Trainspotting", aquel hitazo noventero dirigido por Danny Boyle y cuando escuchamos "Born Slippy", corte incluido en aquella banda sonora, se desata la locura en Bilbao. Sobre el enorme escenario, el vocalista de Underworld, Karl Hyde, se mueve de lado a lado y baila descontrolado. Así, durante hora y cuarto se llena de música electrónica todo el recinto con un concierto intenso lleno de viajes a sus discos más aclamados: "Dubnobasswithmyheadman" y "Second Toughest in the Infants", y dejando de lado su última etapa, más experimental.
_Conciertos del BBK Live 2024 del sábado 13 de julio, TERCER Y ÚLTIMO DÍA :
Cansados pero con ganas, afrontamos la tercera jornada de conciertos, que viene con dos platos fuertes y se nota en la afluencia de público, amyor desde bien temprano.
Empezamos la tarde con el músico etíope Mulatu Astatke, considerado el padre del ethio-jazz que se presenta en Bilbao con una numerosa banda de jazz. Con 81 años, su carrera musical está llena de hitos, como sus colaboraciones con genios del jazz como Duke Ellington.
En Bilbao, Mulate Astatke despliega una jazz session llena de sonidos africanos y latinos, ante mucho público, buena parte guiri. Demuestra su sabiduría con el vibráfono y las percusiones. Y no se olvida de interpretar la música compuesta para la banda sonora de la película "Flores Rotas", de Jim Jarmusch que el público congregado en el escenario Txiki reconoce rápidamente. Quienes le vieron hace unos años en el Jazzaldia de Donostia, nos dicen que allí estuvo más animado, pero a nosotros nos ha gustado en Bilbao.
Continuamos la jornada con la banda Slowdive que actúa en el segundo escenario. Con Rachel Goswell al frente, el grupo desarrolla un dream pop elegante y pausado lleno de efectos en la guitarras. Se disolvieron para volver a unirse en 2014, y son un referente de culto para el britpop de grupos como Oasis o Blur. El entorno de Kobetamendi en Bilbao es perfecto para escuchar temas como "Sugar for the pill" y el clima creado durante una hora por el grupo británico, se disfruta.
Y de ese modo, llegamos casi intactos a una de las citas estelares de esta edición del BBK Live, posiblemente la que más expectación ha creado, la actuación de Jungle. Este colectivo musical londinense, empieza puntual y arranca fuerte con uno de sus temas más reconocibles, "Busy Earnin", que tocan seguido de "Candle Flame". Es toda una declaración de intenciones. El ritmo y la pegada llena de funk, soul y electrónica agita las campas del monte Kobetas. Suenan "Back on 74", "Casio" y, sin tiempo para un respiro y con una fuerza que te arrastra, "Truth". No hay tregua y Kobetamendi se entrega a la energía desplegada sobre el escenario principal por unos Jungle que, tras hora y cuarto sin derecho al descanso, cierran con "Keep Moving", desatando el delirio general. No nos da tiempo a todo, pero nos dicen colaboradores de LA GANZÚA, que Alcalá Norte, dan un concierto genial, con su cantante, luciendo una camiseta de la peña del Athletic, Piratak, y bajando cerca del público por el pasillo vallado para estirar el ambiente desde el escenario, repasando su disco homónimo, ese que les lleva por el camino abierto por Carolina Durante, con una tono vocal, en este caso, que recuerda al de Gernán Coppini en Golpes Bajos. Nos hablan igual de bien de los bolos dados por Zea Mays y Alvvays ("aunque ese escenario con carpa, sigue sonando igual de mal que siempre") y de lo divertidos que han sido en directo los Noname. Y entre otros conciertos que nos dolió perdernos, está el de El Columpio Asesino, banda navarra que está en plena gira de despedida tras más de dos décadas de ejemplar carrera punk pop rock de actitud indie...
Esta es en una edición del festival bilbaíno donde, en líneas generales y con excepciones, ha primado el ambiente distante y frío entre público y artistas. Hemos tenido buenos conciertos pero la maquinaria del festival con tiempos muy puntuales y ajustados parece que a veces sea solo eso, una maquinaria de presentar bandas y músicos. Ves el escaparate pero no puedes entrar en la tienda a comprar. Falta pasión en parte del público y sobra postureo.
Parecía difícil sobreponerse a la energía desplegada por Jungle en esta edición del Bilbao BBK Live pero, hora y media después, sobre el mismo escenario vamos a ser testigos de una comunión total, un éxtasis colectivo, una experiencia religiosa, ya que Albert Pla citó a Enrique Iglesias (jajaja...) Arcade Fire llegan para que no nos olvidemos de ellos. Su concierto aborda todos sus éxitos (ni un solo tema de su último y esplendido disco, "We").
Los líderes de Arcade Fire, Win Butler y Régine Chassagne, marido y mujer, bajan del escenario para mezclarse con la gente. No para de chocar manos y hacerse fotos para Instagram. Son sobados, empujados, zarandeados en mitad de una orda de fans mientras suenan "Everything Now", "The Suburbs" o "Neighborhood". Hay química ante Arcade Fire y como un depredador que ha olido sangre, no sueltan a su presa.
Somos trasladados en el espacio-tiempo y solo despertamos cuando los coros de "Wake Up" se apagan y termina la representación. ¿Porqué no podría durar esto para siempre este concierto de Arcade Fire? Creo que no hemos sido los únicos en pasarlo tan bien, 15 minutos después, y mientras los técnicos recogen rápidamente el escenario, Win Butler reaparece, coge un micro y empieza a cantar a capela "Wake Up". El tampoco quiere que termine el Bilbao BBK Live 2024.
Conviene destacar que en la edición de este año se quitó la torre de sonido que antes había en el medio del área ante el escenario Txiki, evitando, de ese modo, los terribles embudos que se formaban en años anteriores, ejemplo de que los festivales son algo vivo que pueden mejorar año a año más allá de que los conciertos que se programen gusten más o menos. Hasta 2025 :)