Ara Malikian, la increible historia del violinista apasionado
Por: Sergio Santos Sanchez y Patricia Hedrera Gaviño
Ara Malikian ha agotado las entradas en el festival Cultura Inquieta 2017 celebrado en Getafe [Madrid], tocando un día después que Leiva [con Lichis abriendo] para así probar que el festi madrileño apuesta por músicas de muchas islas y mares distintos. Así suena la geografía del alma gracias a la increíble historia [y directo] de un violinista apasiONado.
25 Junio de 2017 en Polideportivo San Isidro, Getafe, Madrid
- · Público: Unas 3.500 personas.
- · Precio de las entradas: 25 euros ENTRADAS AGOTADAS.
- · Promotor: Festival Cultura Inquieta 2017.
Ara Malikian ha agotado las entradas en el festival Cultura Inquieta 2017 celebrado en Getafe [Madrid], tocando un día después que Leiva [con Lichis abriendo] para así probar que el festi madrileño apuesta por músicas de muchas islas y mares distintos. Así suena la geografía del alma gracias a la increíble historia [y directo] de un violinista apasiONado.
Tras sacarnos la espinita de ver a Ara Malikian hace un año en Getafe con nuestra primera cita, intensa y divertida, este año en LA GANZUA tocaba reafirmar nuestro idilio con el libanés-armenio-español-francés-yanosesabequé. De nuevo el culpable es el festival Cultura Inquieta que, un año más, consigue sorprender a propios y extraños con su propuesta ecléctica, variada y de calidad.
Foto: Malikian en uno de sus numerosos cambios de postura al tocar en escena
En el espectáculo (porque ver a Malikian y su banda es más un espectáculo que un simple concierto) repitieron varias de las piezas que vimos el año pasado, como la genial" Life On Mars" del desaparecido David Bowie, la "Misirlou" popularizada por Pulp Fiction, la inmensa "Kashmir" de Led Zeppelin y varias de las piezas de Paganini y Mozart que, en boca de Ara, marcaron su infancia y adolescencia. Esa dicotomía entre clásica y contemporánea se repitió durante toda la noche desde el mismo comienzo, con un medley del" Voodoo Child" de Jimi Hendrix y el "Requiem" de Mozart.
Foto: Al chelo, Cristina López, parte de la banda que arropa a Ara
Si el año pasado el hilo conductor del concierto fue la historia personal de Ara, con su salida del Líbano durante su adolescencia, sus inicios en la música en Alemania y su “peregrinaje” a Francia y España, este año el leitmotiv fue la historia de Violín, su adorado instrumento, heredado de su abuelo y su padre, y que parece tener un anecdotario y hasta vocabulario propio. La historia del violín entroncó con 1915 y su recuerdo del genocidio armenio en el que murió parte de la familia del violinista, que en esta ocasión le dedicó este vals a los 65 millones de refugiados que hay en el mundo.
Foto: Duelo de violines entre Ara Malikian y Humberto Armas
De ese momento íntimo, emocionante, espeluznante, pasaron a la Danza del Percebe, para la cual Ara hizo una surrealista introducción improvisada de más de cinco minutos, con los miembros de la banda -y el público, obviamente- incapaces de contener las risas. Que Malikian es un maestro al violín es conocido en medio mundo; lo que no mucha gente sabe es que, si un día deja la música, podrá ganarse la vida como humorista o entertainer en toda la amplitud de la palabra.
Foto: Nantha Kumar tocando las percusiones de apoyo
También, cómo no, hubo interpretaciones nuevas, varias de ellas sacadas de la última entrega discográfica de Malikian (La increíble historia de Violín, 2016): comenzando con "Kach Nazar" (una danza armenia dedicada a su abuelo, quien le regaló el violín al padre de Ara, que posteriormente se lo regaló al propio Ara), la genial" Réquiem por un loco", "Pisando flores", "Con mucha nata" y "Broken Eggs". Una florida representación del último álbum que el público getafense acogió de brazos abiertos... Hasta que la lluvia llegó.
Foto: Primeras filas del público pendiente del escenario y de la amenaza de lluvia
Una pasajera pero intensa tormenta de verano pasó por el festival cuando el concierto llegaba a su ecuador, diezmando al público (aproximadamente un 15% del público se marchó, especialmente aquellos con niños – que no eran pocos) y haciendo que la banda tuviera que parar de tocar unos 10 minutos por seguridad, hasta que la lluvia amainó. Y cuando volvieron a las tablas, aunque se pudo empeño tanto por parte del público como de los músicos, el concierto no terminó de alcanzar velocidad crucero de nuevo... Una lástima.
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Foto: Tercer violín y guitarra rivalizando por avivar el ritmo del show
Foto: Humberto Armas, al violín también es parte de la banda de Malikian