30 Noviembre de 2019 en Sala Kafe Antzokia, Bilbao

• · Grupo: Airbag + Santiago Delgado y los Runaway Lovers .
• · Público: Unas 400 personas. Medio lleno.
• · Precio: entradas a 12 euros en venta anticipada y a 15 euros en taquilla.
• · Promotora: I Wanna.

Desde la Costa del Sol, Airbag ofrecen un universo hecho de mucho cine, chicas, añoranza de otros tiempos, juergas adolescentes, surf, eternos veranos y cantos al amor o desamor con sus subidas y bajadas de animo, cual montaña rusa. Cuentan y cantan historias divertidas, universales y atemporales, a base de ritmos pop y surf de los 60, punk de los 70 y 80 y un powerpunk de finales de siglo pasado, que (a diferencia del punk más radical y político que se hace en estos lares) solo utiliza las izquierdas y las derechas para indicar el lugar donde rompen las olas. 

Sus referentes musicales son amplios; desde los Clash hasta Weezer, pasando por The Beatles, The Who, The Beach Boys y como no, los Ramones; sin olvidarnos de los patrios: los Nikis y Los Flechazos y los Brincos. Y en cuanto a sus referencias cinematográficas, a pesar de que en sus letras se habla mucho de terror serie B y ciencia  ficción, me recuerdan más al cine de John Hughes ( “Todo en un día”, “El club de los 5”) y al de R. Linnklater (trilogía de “Antes del amanecer”, “Movida del 76” ,”Escuela de rock” y la grandiosa “Boyhood”), sin olvidarnos de la mejor película de George Lucas “American Graffiti”, o de “El Gran miércoles” de John Millus.

Santiago Delgado y los Runaway Lovers fueron los encargados de caldear el ambiente. Lo hicieron con mucha ironía, a base de  rock clásico con rockabilly de los 50 entre referencias líricas a grupos punk como Ramones, Clash, Johnny Thunder, Kaka de Luxe y mis paisanos Eskorbuto.

Terminada la primera sesión de la noche, numeroso público de lo más variado se acerca hasta el “point”, junto a las escaleras del escenario, área que separa la orilla de la rompiente de las olas, esperando a los “riders” musicales estrellas de la velada.

Sobre las 23:15 suena de fondo la surfera “Wouldn´t it be nice”, de los Beach Boys, y sale a escena el trío andaluz Airbag: Adolfo (guitarra y voz solista), Pepillo (bajo y coros) y Jose Andrés (batería) tres tios de lo más “normal”, con pantalones vaqueros, playeras y nikis. No van de estrellas del rock, no lo necesitan con su vestimenta, lo hacen con sus instrumentos y sus voces.

Abren con “Eleven y Mike”, primer corte de su último disco y primera referencia audiovisual, en este caso a la serie "Stranger things". Reparten pop rock a medio tiempo que va creciendo al final cantando... “Nunca tuve amigos como a los 13 años”, o... ”¿acaso alguien sí?”. Ya tienen al público a sus pies bailando y divirtiéndose , algo constante durante los 80 minutos (más-menos) de concierto.

Siguen con “22”, tema pop con coros “uuhh, uhhh” y una letra que resume su universo de apología del amor adolescente y de los... “exámenes”.

Así, van cayendo cortes de su disco de presentación, 6 en total; como “Memoriax 500” , con sonido New Wave y un Adolfo genial a la guitarra entre coros surferos que hablan de una droga que “borrará recuerdos selectivos... solo los que tengo contigo”. 

También interpretan la popera “Koi no Yokan”, donde recuerdan a Los Brincos con un precioso ritmo y riff de guitarra en medio y en la que cantan “el corazón más seguro es el que acaban de romper”; qué gran verdad, ¿o no?

Airbag enlazan tema tras tema, sin apenas interrupcions, salvo ante algún problema con la guitarra y las escasas pero precisas, intervenciones de Adolfo; un “Gabon Bilbao”; “No sé si podremos tocar con lo que hemos comido aquí”; o “Hace 20 años y al acabar vinimos a este preciosos edificio (el Kafe Antzokia) a ver un concierto punk rock”... Añade en su relato un tirón de orejas hacia los presentes. Dice que aunque bailamos, nos divertimos y aplaudimos... “ayer en Donosti la gente se movía más”. Y ahí, nos dio donde más duele así que no les podíamos defraudar.

Escuchamos canciones de todos sus discos :”Spoiler” (en la que nos cuentan que por mucho que hagamos en las relaciones de parejas, al final “lo hacemos todo al revés”) , “La cueva”, “Marcas en la hierba”, y las cañeras y punkis  “Matar a Bill”, “Ladrones de cuerpos” ”La vuelta a la manzana”. Desatando todas más baile, coros y aplausos, con una sonrisa perenne porque en el Antzoki están sus seguidores más fieles.

A mitad del concierto, caen cortes más espídicos y punkis. La locura. Y he de decir que Airbag suenan mucho mejor en directo, más acelerados que en los discos. Los sonidos ramonianos“ de “Big Acuarium”, “Cómics y Posters”, “En los brazos de la agente internacional” y la acelerada “Territorio Dagger” fueron respondidas como se merecen, con mucho baile, puños en alto, con algunos asistentes grabando con su móvil y otros con su birra en mano; todos ellos y ellas con ganas de divertirse y olvidar el clima de inv(f)ierno del último mes.

En la parte final del show, Adolfo baja las escaleras para acercarse al público, mientras que algún que otro sube al escenario a bailar (como el rockabilly que no paró de subir y bajar al escenario durante todo el concierto; se lo pasó en grande).

Y así hasta llegar a “La ola perfecta” una hermosa canción powerpop; metáfora en la que las olas son como las chicas o chicos que no saben “si al cogerla, esta vez voy a caer de pie”.

Aibag se despiden con un “eskerrik asko Bilbao”, abandonan el escenario, pero vuelven tras un general “Beste Bat”; y es que aún quedaban ganas, y muchas, de seguir con el jolgorio. Restaban aún tres canciones para terminar, las dos últimas...  “Tus rechazos golpean dos veces “ y como colofón a una gran velada, “Elena”, de su primer disco Mondo Cretino; puro powerpunk con aroma a verano, playa y chicas en bikini. Ah, dentro del set list de la noche también estuvo "El centro el Mundo" con su palo al abuso de la tecnlogía ("Ten cuiado al hablar, alguien te está escuchando").

El concierto de esta noche en Bilbao quedará en mi recuerdo, no solo por el grupo y sus canciones, que lo hicieron de lujo, sino porque consiguieron reunir a diferentes generaciones de diferentes estilos y vestimentas; había chicos y chicas,  rockers, punks, mods, melenas, camisetas de ACDC, de los Ramones, de The Clash; biseras y boinas inglesas y camisas rockabilliys.

Todos disfrutando del  repaso que Los Runaway Lovers y Airbag hicieron de los toda la evolución del rock desde su origen en los 50 hasta hoy. Y en total armonía, muy lejos de aquellos tiempos, en los que las diferentes “tribus hurbanas” eran irreconciliables, como tan bien se mostró en la clásica película “Quadrophenia”. Así que Airbag: eskerrik asko por haberlo conseguido.