A Johnny Depp le ha cambiado la vida dos veces. En 1984, apenas atendimos su intervención en Pesadilla en Elm Street pero esa película le bastó para entender que allí era más fácil tener diez dólares en el bolsillo que dando cien bolos con su banda. Un actor que aún no lo era y un músico que esperaba su ahora... entendió que en aquella California de los años 80 no había público para los grupos de alma vintage con repertorio rock and blues. La segunda patada al culo de sus días llegó entre dos palos y una calavera. Piratas del Caribe hizo que Depp dejase de ser el alterego de Tim Burton para convertirse en el año 2000 en un millonario al convertirse en Jack Sparrow, el bríbón más divertido de los siete mares. Desde entonces, Jack, digo... Johnny, cruza las aguas del siglo 21 subido al barco que le da la gana, yendo de puerto en puerto, de puerta en puerta, si así lo quiere. En una jugosa entrevista publicada por Glenn O Brien en la revista Magazine, editada los domingos por La Vanguardia, Johnny dice que Tom Waits se cayó de culo al visitar su casa cuando llegó al estudio donde colecciona guitarras hasta el hartazgo. Depp lo cuenta para apoyar la nueva campaña publicitaria de una colonia que no quiero citar pero sí daré el nombre de quienes forman con él su nuevo grupo, los Hollywood Vampires : Alice Cooper y Joe Perry. Reverencia, por favor. Sigamos. Johnny, Alive y Joey, juntos los tres, han ofrecido un llamativo concierto en el festival Rock in Río 2015 de Brasil con el apoyo de algún que otro corsario inesperado, caso de Andreas Kisser, tocando clásicos del rock como... My Generation, de los Who o el Manic Depression popularizado por Jimi Hendrix, canciones indomables, viejas pero eternas, que siempre encontrarán almas quinceañeras que aprendan a cantar y tocar en ninguna parte hasta llegar a algún puerto, famoso o perdido para crecer como actores, músicos o personas cada cual con su mundo. Piratas como Johnny Depp Jack Saparrow son imprescindibles para que la música norteamericana no acabe ahogada entre los gluteos de Nicki Minaj. ------------------------------- Xabier Sanmartín Cuevas / Periodista