En Europa, y sobre todo aquí, hay quien escucha jazz deseando estar en un club para no mezclarse con la masa.

Ese fenómeno perjudica al jazz, y a la música en general, pero hay gente que lo combate, gente que escucha jazz con la naturalidad del quinceañero que oye rap en su reproductor mp3, Sebastián Íñigo es uno de esos defensores del jazz abierto. Gaditano de Jérez, hace Puerta Abierta [puerta_abierta@hotmail.com] en www.radioobradoiro.com [domingos 18 h., y viernes 00 h.]. Como le avisó tarde la discográfica y no le daba tiempo a entrevistar a Bobby Martínez, saxo de latin jazz, la charla fue a parar a La Ganzua radio pero... ¿quién es?, ¿qué música hace?, ¿cuál es su teléfono?, ¿dónde toca en su gira...?

A todo eso respondió Chano Íñigo como si fuera el mejor manager del mundo para Martínez pero sin serlo ni cobrar por ello, de esa forma, mandó el disco ["Latin elation"], dossier, teléfonos de contacto, etc. El músico valoró ese esfuerzo al llamarle, estaba encantado de hablar de música en la radio, de música y no... "de mi libro".

Martínez, criado en Miami, donde compuso para gente como Gloria y Emilio Stefan, destaca el trabajo de Fernando Trueba con la película "Calle 54"... "porque aquí os abrió la cabecita para perderle el miedo al latin jazz....", dijo. Y es curioso, Trueba suele ser crucificado por ciertos seguidores del jazz, por los hiper-puristas, claro.

Hace dos o tres años, al convocar, con una treintena de revistas de música en internet, los I Premios de Música Independiente, estaba entre los finalistas de Jazz el disco de Bebo Baldés y El Cigala [amparado por Trueba] bien, pues... esa presencia recibió más de cien mensajes en contra en el foro de www.tomajazz.com, recomendable revista que también colaboraba en esos premios. Eso indica que esos hiper-puristas hacen más rudio de lo que parece y aunque sean minoría, existen y resisten, los hay en todo estilo musical.

Menos mal que crece el número de gente, músicos, revistas, seguidores, que como Martínez e Íñigo, disfrutan del jazz sin creerse más que nadie, y donde va jazz vale poner pop, rock, hip hop, flamenco, house...

por xabier sanmartín c.