¿Quién no ha gritado alguna vez "Mucha policía, poca diversión"?. La frase es de un tema de Eskorbuto e incluso fué usada como lema de unas fiestas de Bilbo en los años 80.

El detalle aparece en "Eskorbuto, historia triste", libro que acabo de terminar con la sonrisa algo torcida mezcla de ese espíritu vitalista que irradiaban Yosu y Jualma, los dos tercios más sinceramente salvajes de Eskorbuto.

El libro se lleva bien y ayuda a entender lo que fué el punk y el mal llamado rock radical vasco, movimiento con mucha trampa con cartón. Su autor, Diego Cerdán, hace un justo homenaje recopilando anécdotas, artículos de la época, entrevistas, transcribiendo cintas de casette, buscando gente que les conoció, una labor de chino, o mejor... de china, que diría Yosu.

Lo compramos para la redacción la pasada navidad en la librería bilbaina Urretxindorra, costó 9 euros pero su sinceridad descarnada vale mucho más. De los tres miembros, Paco sigue vivo y me pregunto qué opinará del punk hoy cuando ves que La Polla presenta sus discos en la sede madrileña de la Sgae.

Hemos intentado entrevistar a Diego Cerdán pero no contesta a las propuestas, pese a ello estamos preparando un dossier sobre Eskorbuto, banda que es mucho más que una camiseta.

Marisol