09 Mayo de 2013 en sala Kafe Antzokia, Bilbao

• · Grupos: The Muggs.
• · Público: Unas 200 personas [medio aforo].
• · Precio: 10 euros en anticipada, 12 en taquilla.
• · Promotora: Déjame Decirte.

Danny Methric, Tony DeNardo y Matt Rost se toman unas cervezas con el público reunido en la sala Antzokia de Bilbao. Son las nueve y media de la noche, quizá las diez menos cuarto. De pronto, los tres músicos dan un salto y sin avisar suben al escenario y se arman de sus instrumentos. Un, dos, tres y... suena "Doc Mode" después de un americanizado "Hola Bilbao". Los acordes de la primera canción atrapan a los que estamos desperdigados frente al escenario. Algunos atrevidos mueven ya el cuello, los demás pateamos tímidamente el parqué esperando la magia que The Muggs promete en sus discos. Un motivado Methric [vocalista] se balancea acariciando las cuerdas de su guitarra, mientras, a su derecha un peluche parecido a una ardilla vigila la escena. ¿Será un amuleto?

The Muggs ya muestran sus cartas en ese primer tema. Nos regalan perennes minutos donde solo dialogan guitarra, teclado y batería. Una delicia que disfruta igual el público que ellos subidos a la tarima. De Nardo [bajista y teclista] brinda a la salud de los presentes con un chupito y empieza "Said & done". Las pocas dudas que quedan desaparecen, consiguen enganchar incluso a quienes solo seguían moviendo unicamente los pies. El hard rock más puro pulula por el Antzokia y al acabar esa canción imanta a los seguidores hacia el escenario. Cerca, muy cerca de los tres rockers de Detroit [EE.UU].

El carisma del vocalista me recuerda al Robert Plant menos amanerado. Led Zeppelin también se evoca en algunos puntazos psicodélicos. Llega "6 to Midnite" y el antes bajista y ahora teclista cobra protagonismo. Lo está pasando jodidamente bien. Mientras oprime el teclado con la mano izquierda, se levanta de forma insistente de su banqueta. Su teclado está enchufado a un amplificador de bajo pero es indudable el parecido con el sonido del bajo eléctrico. En una de sus rebeliones, cruza la mirada con el batería y se sonríen. Está claro, hay complicidad entre ellos. ¡Normal después de trece años de conciertos!

Aparto la vista de los Muggs y miro al público. La sala se ha llenado considerablemente. Más de tres cuartos del aforo son hombres de muy diferentes edades. Las féminas no llegan a diez. ¿Será el rock clásico cosa de hombres? ¡Bah!, Janis Joplin ya dejó claro que no.

El trío estadounidense sigue a lo suyo. Los riffs y solos del guitarrista son un placentero viaje a los orígenes del hard rock. Ya han sonado temas de sus tres discos de estudio: el homónimo de su debut en 2005, On With the Show en 2008 con el que demostraron que su éxito inicial en la escena alternativa no era casualidad y su penúltima criatura Born Ugly [2011], con un sonido que no se parece en nada al título. Todos ellos resumidos en su reciente doble disco en directo, Full Tilt [2013].

La noche sigue. El guitarrista y cantante Danny Methric pregunta si lo estamos pasando bien antes de regalarnos un blues que enlaza con un tema rock. Methric baja las escaleras punteando para encontrarse con sus seguidores. Agolpado frente a sus cuerdas, el público da paso a la siguiente canción con un "one, two, three". De ritmo acelerado, el batería golpea más fuerte que nunca. El bombo marca las pulsaciones de la música de The Muggs. Los temas propios se entremezclan con las versiones. Tocan "I take what I want" y también "Help" de The Beatles.

Ante un amago de despedida, el grupo norteamericano se marcha de forma fugaz antes de regresar con una cámara que captura la motivación de una sala que agita los brazos al aire. Tres canciones más sirven para cerrar el concierto. El guitarrista pide una escueta jam a sus compañeros y el espectáculo finaliza. Y a la misma velocidad con la que subieron al escenario, bajan y se dejan preguntar. Un exaltado Methric comenta que es la tercera vez que pisan estas tierras. El concierto le ha parecido "great" y nos cuenta que le gusta el local bilbaino porque tiene "buen sonido" [sin embargo, allí algunos criticaron que los instrumentos se embarullaron sin distinción].

Al acabar, llega la hora del merchandasing y la firma de discos en la puerta del local antes de la recogida de instrumentos. The Muggs se hospedan en el hotel de al lado. No sabemos si con minibar incluido...

Foto:The Muggs, tres rockers que levantaron al público de Bilbao...